Apariencias engañosas: Sautrántika

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Repaso

Hemos hablado sobre las apariencias y cómo la mente está involucrada en eso. Hemos visto que cuando hablamos de apariencias, hablamos de algo que aparece en la mente y que tiene una relación profunda con la mente. Y cuando hablamos de mente, hablamos de actividad mental y no de quien la realiza.

¿Qué es la actividad mental? La actividad mental se define con tres términos. La primera es la claridad, que significa dar surgimiento a apariencias cognitivas. Estas son las apariencias de las que hemos estado hablando, que hemos estado describiendo como algo similar a un holograma mental. Y no solo eso, sino que otra forma de describir el proceso es un involucramiento cognitivo con estos hologramas. Así que no es solo un espejo que genera imágenes. Y estas son solo dos formas de describir el mismo evento. Y la palabra “meramente” se agrega aquí para indicar que no hay un yo separado que haga que esto suceda o que se aleje de ello y lo observe.

Un punto que necesitamos entender aquí es que, cuando hablamos de este tipo de actividad mental, no tiene nada de malo. Dar surgimiento a las apariencias, a estos hologramas mentales, es lo que hace una mente ordinaria; es lo que hace una mente que tiene una comprensión correcta, no conceptual, de la vacuidad; es lo que hace la mente de un buda. No hay nada de malo en este proceso.

Apariencias engañosas de lo que algo es y de cómo existe

Cuando hablamos de apariencias, ayer introdujimos el punto de que hay una apariencia de lo que algo es y una apariencia de cómo existe. Aunque están mezcladas, podemos abordar la validez de cada una por separado. Esto está asociado con el hecho de que, cuando hablamos de actividad mental, está la actividad mental que da surgimiento a la verdad convencional o relativa de las cosas, y el aspecto de la mente que da surgimiento a la verdad más profunda sobre las cosas; la verdad más profunda se refiere a cómo existe. Así es como se explica desde el punto de vista de la interpretación Gelug del Prasánguika.

Entonces, cuando hablamos de la apariencia convencional de lo que algo es, puede ser precisa o distorsionada. Y entonces, por supuesto, tenemos que entender eso y darnos cuenta, reconocer: si lo que me parece que algo es como “eres un monstruo”, es preciso o no. Entonces, cuando nos referimos a la apariencia de cómo existe algo, entonces también puede ser correcto cómo existen las cosas, pero para todos nosotros, excepto para un buda, la mente da surgimiento a una apariencia engañosa ('khrul-snang) de cómo existen las cosas. Además, cuando nos enfocamos de manera no conceptual en la vacuidad, en ese momento tampoco hay actividad mental que dé surgimiento a una forma falsa en la que existen las cosas.

Hay dos etapas que debemos comprender con respecto a una apariencia engañosa de cómo existen las cosas. La primera sería que existe esa apariencia engañosa y creemos que corresponde a la realidad. Si creemos que esto corresponde a la realidad, que “existes desde tu propio lado permanentemente como un idiota o un monstruo”, por ejemplo, entonces sobre esa base desarrollamos emociones perturbadoras, como la ira. Si dejamos de creer en estas apariencias engañosas de cómo existen las cosas, entonces ya no surgirán emociones perturbadoras. Nos convertimos en un ser liberado, se llama arhat.

Pero todavía surgen estas apariencias de formas imposibles en las que existen las cosas. La cuestión es que no creemos que se refieran a nada real y por eso no nos dejamos engañar. Entonces, por ejemplo, esta persona que intenta adelantarme en la carretera tocando su bocina salvajemente me parece existir desde su propio lado para siempre como un idiota, pero sé que eso es ridículo, así es simplemente la forma en que mi mente hace que las cosas aparezcan y no me enojo.

Pero para convertirnos en un buda, lo que debemos hacer es detener para siempre la mente que da surgimiento a esta apariencia engañosa de cómo existen las cosas. Porque cuando nuestra mente da surgimiento a que las cosas existen de una forma imposible, entonces, por ejemplo, da surgimiento a que las cosas parezcan como si existieran aisladas por sí mismas, para usar un ejemplo simple. Y entonces no somos capaces de percibir, por ejemplo, si le enseño algo a alguien, cuáles serán todos los efectos de eso a partir de ahora para siempre, no solo en esta persona, sino en todas las personas con las que esta persona interactúa. Y cuando percibo que alguien tiene un cierto estado mental y un cierto nivel de perturbaciones, parece existir aislado por sí mismo, sin todas las demás causas y condiciones que provocaron esto sin principio.

Si realmente queremos poder beneficiar a los demás lo mejor posible, tenemos que lograr que la mente deje de producir apariencias como si las cosas estuvieran recubiertas de plástico, existiendo simplemente por sí mismas, para que podamos ver la interconexión de todo; y el punto más relevante de eso es en términos de causa y efecto. Entonces, como el Buda, la mente omnisciente de un buda da surgimiento a apariencias y éstas se conocen como “apariencias puras” (dag-snang), que no solo son precisas en términos de lo que son las cosas, sino que también son precisas en términos de cómo existen las cosas.

Entidades objetivas

Comenzamos a revisar el análisis, una presentación de estos aspectos mentales u hologramas mentales o apariencias en términos de las diferentes escuelas filosóficas indias tal como lo explica la tradición Gelug del Tíbet. Empezamos con los Sautrántika. Ahora, en términos del Sautrántika, el Sautrántika afirma que hay dos tipos de fenómenos, lo que se llama entidades objetivas (rang-mtshan) y entidades metafísicas (spyi-mtshan). Las entidades objetivas serían cosas como objetos externos y, para hablar en términos muy generales, son objetivamente reales, sin entrar en toda la jerga técnica de cómo existen.

Entonces, podemos hablar de formas de fenómenos físicos, podemos hablar de maneras de darse cuenta de algo, como ver, pensar, felicidad, enojo, etc., y también podemos pensar en lo que se conoce como variables que afectan no congruentes, que son básicamente cosas que son objetivamente verdaderas y que cambian momento a momento, como formas de fenómenos físicos o maneras de darse cuenta de algo, pero que no se encuentran en ninguna de esas dos categorías. Y son no congruentes en el sentido de que no comparten ciertas cualidades con la cognición en la que uno se da cuenta de ellas.

Variable que afecta no congruente, este es un término muy difícil. En tibetano tiene dos partes, denmin y duchey (ldan-min ‘du-byed). Duchey significa algo que afecta a otras cosas. Permítanme hablar de ejemplos, para que sepamos de qué estamos hablando, cosas como el movimiento, el envejecimiento o una persona. El movimiento mueve las cosas de un lugar a otro, las afecta. El envejecimiento afecta al cuerpo. Una persona puede beber un vaso con agua, una persona puede hacernos daño, puede ayudarnos, por eso afectan lo que experimentamos. Pero no son una forma de fenómeno físico. No tienen color ni forma y esas cosas. Y no se trata de maneras de darse cuenta de algo, que cuando ocurren juntas en un momento de cognición, son congruentes entre sí.

Congruente (mtshungs-ldan) significa que comparten cinco características entre sí. Esta palabra tibetana denmin significa que no posee. ¿Qué no posee? No posee estas cinco características de congruencia. Cuando hablamos de una cognición en la que hay visión y también una sensación de felicidad y también hay atención, interés y apego, solo estoy dando ejemplos de cosas que van juntas, incluidas las emociones perturbadoras y las emociones positivas. Todas ellas, por ejemplo, son congruentes, lo que significa que todas están dirigidas al mismo objeto, ocurren al mismo tiempo, etc. Lo que es relevante aquí en nuestra discusión es que todas dan surgimiento a una apariencia: la apariencia es algo que surge; no piensen en la apariencia solo como algo visual.

El contenido de un holograma mental

Entonces esto se convierte en una pregunta interesante: cuando tenemos un momento de experiencia, hay una apariencia, algo que surge, una especie de holograma mental. Entonces, ¿cuál es el contenido de este holograma mental? Ayer hablamos simplemente en términos de, por ejemplo, si se trata de ver algo, como ver un ser humano, el cuerpo de un ser humano o el cuerpo de un perro, hay formas coloreadas y también el objeto convencional de – ayer decíamos "un perro", pero en realidad seamos un poco más precisos – un cuerpo. Ahora bien, ¿existe un holograma separado o no? ¿Es parte del mismo holograma en el que también está el surgimiento, no solo en términos de ver esto, sino también de sentir infelicidad, miedo y atención? Cuando hablamos de apariencia, también nos referimos al surgimiento de estas cosas. ¿O es todo parte de un holograma?

Aunque podemos diferenciar mentalmente entre todos estos factores y todos estos aspectos dentro de un holograma mental, de hecho, estamos hablando de un holograma, un evento mental. Recuerden, ayer mencionamos brevemente al final que también ocurre lo mismo cuando vemos un campo visual completo. ¿Está todo junto en un evento mental o hay pequeños eventos mentales de cada forma coloreada uniendo todo o este tipo de cosas? Este es un punto muy interesante.

Entonces, cuando hablamos de este holograma mental, tenemos que discutir sus diferentes aspectos. El contenido tiene dos aspectos: uno es un objeto del darse cuenta y el otro es el aspecto del darse cuenta.

¿Es lo mismo que objeto y sujeto? 

Creo que debemos evitar palabras como "sujeto" aquí, porque sujeto suena como si estuviéramos hablando de la persona que percibe esto. No entremos en esa complicación. Solo estamos hablando de lo mental, la conciencia de algo.

Entonces, estábamos hablando de fuentes natales, como un horno para una barra de pan. Según el Sautrántika, el objeto que aparece en el holograma mental, digamos las formas coloreadas y el objeto convencional, un cuerpo, su fuente natal proviene de la entidad objetiva externa, un cuerpo real, un perro real, etc., que existe en el momento previo a que lo percibas. Y la parte cognitiva de este holograma, las partes del darse cuenta, con el ver, la felicidad, la infelicidad, la ira, el miedo, etc., todo eso proviene de una fuente natal en términos del continuo mental. Entonces, eso sería lo que se conoce como una “semilla kármica” o una “tendencia” (sa-bon), es decir, una tendencia a la ira, una tendencia a ver perros en lugar de una tendencia a ver dinosaurios.

Ahora bien, hay dos puntos de vista. El Abhidharmakosha, un texto indio que es el que aceptan los Sautrántika, dice que todos los factores y la conciencia primaria –ver, etc.– en una cognición, en un momento, provienen de diferentes tendencias kármicas, pero se juntan y forman una apariencia coherente, porque obviamente pudimos ver a este animal sin miedo. Pero el Abhidharmasamucchaya, el otro texto principal del Abidharma al que siguen los Chitamatra, que discutiremos un poco más adelante, dice que todo el evento mental surge de una tendencia kármica, una semilla kármica, porque es un evento coherente.

Estos son puntos muy relevantes; no son solo filosofía abstracta, porque en un momento estamos experimentando algo. No estamos solo experimentando la apariencia de algún objeto, sino que también experimentamos todo tipo de formas de darnos cuenta de algo. Y si sabemos cuál es su fuente natal, entonces podemos intentar trabajar en: ¿Hay algún problema al ver un perro? No, no hay ningún problema en ver un perro. ¿Hay algún problema con la apariencia del perro? Bueno, no en términos de lo que es, tal vez en términos de cómo existe, como “este monstruo que me va a atacar”. Eso puede ser preciso o no. Entonces tenemos que verificar estas cosas. ¿Estamos proyectando “todos los perros muerden” o cuál es la apariencia aquí? Y luego, por supuesto, cómo existen los perros y demás, cómo existe este perro, ese es otro aspecto de lo que aparece. Y luego, por supuesto, están los aspectos del miedo y la atención, etc. Entonces, ¿en qué nos gustaría trabajar para poder vivir la experiencia de ver a este animal sin ningún problema? De modo que el análisis nos ayuda a localizar dónde están las diversas áreas problemáticas en nuestra experiencia momento a momento de las apariencias.

Fenómenos conocibles por imputación

Ahora bien, nuestra discusión surgió del análisis de variables que afectan no congruentes. Y así, por ejemplo, cuando hablamos de movimiento o hablamos de una persona, no son como una manera de darse cuenta de algo; no es que estén saliendo de alguna semilla kármica; no es que se estén enfocando en el mismo objeto que todo lo demás en ese momento de cognición. Una persona o un movimiento no provienen de la misma fuente natal que el ver y el miedo. Una persona – también nos referimos a un ser individual limitado, por lo que el perro también es una persona en ese sentido, es un ser sintiente individual o un ser limitado. Entonces, en cierto sentido, la fuente natal proviene de este objeto externo, la fuente natal del movimiento o del ser individual. Esas son entidades objetivas. Pero, a diferencia de una forma de fenómeno físico, no tiene forma ni color, ni olor, etc. El cuerpo tiene forma y color, el cuerpo tiene olor, pero no el movimiento del cuerpo. Entonces estos factores, como el movimiento y un ser individual, son lo que se conoce como conocibles por imputación (btags-yod).

Son conocibles por imputación, es la misma palabra btags que "etiquetar, designar". Lo que esto significa es que en la mente –esta es solo una manera fácil de decirlo– tiene que surgir primero otro holograma mental, antes de la cognición de esta cosa. En otras palabras, tiene que haber un holograma mental de algo más que está surgiendo en el momento inmediatamente anterior y también al mismo tiempo que el holograma de esto. En otras palabras, primero tiene que haber un holograma de un cuerpo justo aquí en este lugar y luego, al momento siguiente, hay un holograma de un cuerpo a dos centímetros de distancia y, con base en eso, podemos imputar movimiento y ver movimiento. Entonces tiene que haber algo justo antes y luego algo después que sigue apareciendo, sobre lo cual se imputa movimiento. O primero hay un cuerpo y luego junto con el cuerpo un ser, un ser individual, una persona.

¿Cómo ves el movimiento? Vemos movimiento; el movimiento existe objetivamente. Pero esto es diferente de lo que se conoce como fenómenos autosuficientemente conocibles (rdzas-yod). Autosuficientemente significa que no tiene que haber un holograma de algo diferente en el momento anterior y al mismo tiempo para poder percibirlo, como un cuerpo. Vemos las formas coloreadas y el cuerpo, porque vemos un objeto convencional, el cuerpo, y no tenemos que percibir algo antes para poder percibirlo. Es autosuficientemente conocible.

Ahora podemos hacernos la pregunta: ¿qué pasa con la relación entre percibir el todo y las partes? Percibir el todo, ¿es algo conocible por imputación o es autosuficientemente conocible? ¿Tienes que ver las partes primero y luego al momento siguiente ver el todo? No, según el análisis budista se ve la parte y el todo simultáneamente y, por lo tanto, no es conocible por imputación. “Conocible por imputación” significa que primero hay que haber visto las partes y luego haber visto las partes y el todo juntos.

Lo mismo en términos de ver alguna base para las cualidades y las cualidades. Aquí estamos hablando de un objeto y sus formas coloreadas, lo visible del objeto. No es que tengas que ver el objeto primero y luego ver la forma coloreada del objeto o que veas la forma coloreada y luego veas el objeto convencional. O las características definitorias: no es que veas primero las características definitorias de este animal y luego, al momento siguiente, te des cuenta de que es un perro. Ves las características definitorias y al perro al mismo tiempo. Quizás no sepas que es un perro. Eso es otra cosa, pero aun así ves al perro al mismo tiempo que ves las características que lo definen.

Solo un punto más antes de que tengamos nuestro descanso. Cuando hablamos de cognición no conceptual, cognición sensorial (ver, oler, oír, etc.), hay un holograma mental, por lo que lo percibimos o lo vemos a través de un holograma mental, que es una representación mental. Y ese holograma mental es algo que cambiará de momento a momento, es no estático, aunque no es un objeto externo, nadie más puede verlo.

¿No puede verlo un Buda? 

No entremos en eso, porque luego está la percepción extrasensorial y demás, pero en cualquier caso no es exactamente como un fenómeno externo. Y su fuente natal, el aspecto objetivo de él, proviene de una entidad objetiva que existe externamente en el momento anterior a la cognición. Y, según la explicación Gelug, el holograma mental es completamente transparente, por lo que a través de él vemos realmente el objeto externo. Entonces vemos ambos, básicamente vemos el aspecto mental, el holograma y ese animal frente a nosotros. Y vemos como entidades objetivas no solo formas coloreadas, en realidad vemos un objeto, una cosa, y es un animal y la cosa que vemos no es solo un cuerpo, sino que también podemos ver el movimiento del cuerpo y también podemos ver que es un ser vivo, un ser vivo individual, no solo una imagen de un perro que alguien está moviendo.

La identidad convencional de las cosas

Hay que añadir una cosa más sobre los objetos de sentido común, o también se les llama objetos de experiencia convencionales. Recuerden que hablábamos de ellos como objetos que se extienden a toda la información sensorial y también perduran en el tiempo, no solo en un microinstante. Pero hay más que debemos entender sobre ellos. Cuando decimos “perdura de momento en momento”, eso no significa que sea estático. Por supuesto que cambia de un momento a otro. Sin embargo, es algo que –esto es parte de la definición– tiene su propia naturaleza esencial individual. Eso significa que mantiene su propia identidad convencional individual como esto y no aquello; y se distingue de otros elementos individuales; en otras palabras, conserva su individualidad como cosa, aunque sea una continuidad de momentos en constante cambio.

Y cuando hablamos de sostener su propia identidad individual convencional como esto y no como aquello, tenemos que agregar, que se establece como válida con relación a ciertos grupos de seres. Por ejemplo, tenemos este ejemplo clásico de un vaso con líquido. Tiene la identidad de agua para los seres humanos, de néctar para los dioses y de pus para los fantasmas. Así que mantiene su identidad individual como esto y no como aquello con relación a un grupo específico y es válido como agua, pus o néctar para ese grupo. Entonces es relativo. Es válidamente cada una de estas cosas.

Pero como aquí estamos hablando en términos de la escuela Sautrántika, una de las características definitorias de una entidad objetiva es que tiene que desempeñar una función, una función que está relacionada con lo que es. Entonces, por ejemplo, si veo este perro y pienso que es una puerta, incluso si tengo un grupo de personas que están de acuerdo conmigo en que es una puerta, este perro no puede funcionar como una puerta. Sin embargo, este líquido funciona como néctar, pus o agua para los dioses, los fantasmas o los humanos. Así que hay que tener cuidado de no pensar en esto en términos de agua, que es pus para los fantasmas. No es agua la que es pus para los fantasmas. Es agua para los humanos que funciona como pus para los fantasmas. No es que sea: “Bueno, ¿qué es realmente? Es realmente agua”. No es eso. Es igualmente válido cada uno de estos. Entonces, desde un punto de vista Sautrántika, lo que dirían es que tiene su identidad individual como elemento, como cosa, pero luego su naturaleza como agua, pus o néctar es otra cosa, es otro tipo de identidad.

Daré otro ejemplo, otro ejemplo que es muy, muy importante. Cuando pensamos en una persona y pensamos en vidas futuras o pasadas, "es realmente Alex y en su última vida Alex fue Napoleón y en la próxima Alex será Fifí el caniche". Así que no es que sea verdaderamente una identidad como Alex, que es en la última vida esto, en la próxima vida aquello. Sino que es una persona, un ser individual, y ese ser individual durante una vida es Napoleón, una vida es Alex, una vida es el caniche, una vida es... lo que sea. Desde el punto de vista Sautrántika, es simplemente una persona, como una cosa, como una entidad objetiva, que en una vida es esto y en otra aquello. No es que una identidad sea lo que realmente es, que realmente sea Alex y yo voy a renacer como el perro o como lo que sea. Ese es un punto muy, muy importante cuando se empieza a pensar en el renacimiento.

Así, un objeto de sentido común conserva su individualidad, su identidad convencional individual como algún elemento, a lo largo del tiempo. Y otra parte de la definición es que es un objeto de la experiencia ordinaria al que se refieren convenciones de palabras y conceptos. Es a lo que se refieren las palabras, las convenciones o los conceptos, a lo que los conceptos se refieren es un objeto de sentido común. ¿Recuerdan? Dijimos que mantiene su identidad individual como esto y no aquello. Entonces tenemos las palabras “esto y no aquello”, y es a lo que se refieren esas palabras.

Entidades metafísicas

Ahora estamos listos para la cognición conceptual. Cuando nos adentramos en las palabras, convenciones y conceptos, entramos en el ámbito de la cognición conceptual. Bien, sigamos con el Gelugpa aquí. Cuando hablamos de cognición conceptual, se trata de entidades metafísicas. Recuerden, dijimos que el Sautrántika divide lo que existe – lo que existe es lo que puede ser conocido válidamente – lo divide en entidades objetivas y entidades metafísicas. Entonces, las entidades objetivas son cosas que no son estáticas, lo que significa que cambian momento a momento, afectadas por causas y condiciones y afectan otras cosas.

Y recuerden, teníamos formas de fenómenos físicos y manera de darse cuenta y estas variables que afectan que no son ninguna de estas dos, las variables que afectan no congruentes. Cambian momento a momento, la mayoría perduran, tienen una continuidad, un continuum. La mayoría de ellos, no todos. Un instante no tiene continuidad. Y desempeñan una función, hacen algo. Eso es lo que significa afectar a otra cosa, hacen algo.

Cuando hablamos de entidades metafísicas, hablamos de cosas que pueden ser válidamente conocidas, pero son estáticas, lo que significa que no se ven afectadas por nada, ni afectan a nada más. No cambian y no hacen nada. Entonces, por supuesto, hay una lista de estas cosas, pero las que son relevantes para la cognición conceptual son las categorías (spyi). Así que las que son relevantes para nuestra discusión aquí son las que yo traduzco como categorías. A menudo se traducen como “universales” o “generalidades”, pero no encuentro que esos términos sean tan útiles porque incorporan muchas asociaciones occidentales de la filosofía occidental, que son irrelevantes.

Disponemos de dos tipos de categorías. Una es una categoría de audio (sgra-spyi) y la otra es una categoría de significado/objeto (don-spyi). ¿Qué es una categoría de audio? Esa es una categoría derivada de los sonidos. Piensen en esto en términos de una palabra como "perro". Diferentes personas pueden decir la palabra "perro". Pueden decirlo más alto o más bajo, con voz masculina, con voz femenina, con todo tipo de pronunciaciones diferentes. Pero sin importar quién lo diga, con qué tipo de voz, incluso podría ser una voz de computadora, tenemos la categoría de audio de "están diciendo la palabra perro". Hay una categoría aquí en la que todo esto es la misma palabra. Entonces hay una categoría que se deriva de todos los diferentes sonidos, formas de pronunciar algo, consonantes y vocales. Es realmente bastante sorprendente; de lo contrario, ¿cómo sabríamos que dos personas con voces diferentes están diciendo la misma palabra? Son sonidos diferentes después de todo, ¿no es cierto?

Luego hay una categoría de significado o categoría de objeto, que es a lo que se refiere esta categoría de audio, su significado o los objetos a los que se refiere. Hay muchos animales, y de todos estos diversos animales derivamos la categoría de "perro". Y hemos hecho una convención de que estos sonidos, que son sonidos totalmente arbitrarios y sin sentido por su parte, en inglés dog, en ruso so-ba-ka, son sonidos totalmente sin sentido y algunos cavernícolas, o algo así, gente primitiva, se reunieron y decidieron que este conjunto de sonidos va a tener un cierto significado.

Es realmente muy extraño, de hecho, muy extraño si lo piensan, cómo los sonidos arbitrarios llegaron a tener significado, que se refieren a algo. Entonces tenemos categorías de audio de todas las diferentes personas de las cavernas que hacen gruñidos o lo que sea y la gente decide que todo eso encaja en una categoría de audio y tendrá una categoría de significado que se refiere a todos estos animales, que vamos a derivar de esa categoría “perro”. De esto es de lo que hablamos cuando hablamos de convenciones. Es algo creado mentalmente por una persona o un grupo de personas. El lenguaje es el mejor ejemplo. Ahora bien, el lenguaje no tiene nada de malo, lo necesitamos para comunicarnos.

Cognición conceptual

¿Qué es una cognición conceptual? Es una cognición que imputa una categoría de audio o una categoría de audio y significado a un holograma, un holograma mental de alguna entidad objetiva, y mezcla las dos. Y es una cognición engañosa; no errónea, podría ser precisa. Otro sinónimo de esto sería “es confuso”, es una cognición confusa. ¿Por qué es confusa? Porque considera que esta mezcla es una entidad objetiva que existe externamente.

Todo el mundo estaría de acuerdo con esta definición, no solo el Sautrántika. Percibo este objeto, es una cosa convencional, es una cosa encapsulada en plástico, desde el punto de vista Sautrántika. Entonces hay un holograma mental de una cosa, no solo parches de colores, y ahora le superpongo la categoría de audio de p-e-r-r-o y también el significado, un objeto. ¿Qué es? Es un perro y creo que objetivamente hay un perro ahí afuera, mientras que en realidad solo hay un objeto que está etiquetado como un perro, pero también podría ser un hogar para gusanos en su estómago o pulgas.

Esto se vuelve muy importante en términos de convenciones, las categorías de cosas como “buena”, “mala”, “criatura agresiva”, ese tipo de cosas. O nuestro ejemplo de un ser individual que piensa que objetivamente existe Alex que siempre fue Alex como parte del continuo. No es parte del continuo.

Etiquetado mental

Este proceso es lo que también se conoce como etiquetado mental. Y es interesante cuando... avancemos un poco hacia el Prasánguika. Cuando dice eso, lo que normalmente se traduce como “todo existe por medio del etiquetado mental”, es una manera muy, muy engañosa de traducir, porque cuando lo traduces de esa manera suena como si el etiquetado mental produjera un perro y si no lo llamaras perro, no sería un perro. Y entonces, si dejaras de etiquetar mentalmente, no existirían los perros. Eso es tonto.

De lo que hablamos en toda la discusión budista sobre cómo existen las cosas no es en realidad hablar de cómo existen las cosas. Se trata de cómo se establece la existencia de algo. Es la palabra tibetana drub (sgrub), drub es establecer, probar algo. Entonces, ¿cómo se establece que existen los perros?

Algunas de las escuelas no Prasánguika dirán que, desde el lado del objeto, se pueden encontrar características definitorias que, por su propio poder, lo convierten en un perro. El Sautrántika y el Chitamatra dirían eso. El Svatántrika diría: “Bueno, sí, existen estas características definitorias; pero es en conexión con el etiquetado mental que se establece como perro”. El Prasánguika dice: “No. ¿Cómo se establece que existen cosas como los perros? Bueno, la única manera de establecerlo es que es a lo que se refiere la palabra ‘perro’ sobre una base para la imputación”.

Un buda no tiene cognición conceptual. Cuando tenemos cognición no conceptual, vemos cosas. No hay etiquetas mentales. El etiquetado mental es puramente conceptual. Es imputar un audio o una categoría de significado sobre una base, algo que aparece. Pero eso no significa que cuando vemos esto no sea un perro y solo cuando lo vemos como un perro lo convierte en un perro y un buda no ve perros. Esto es una tontería.

Vemos perros. Vemos varias cosas. Pero, ¿cómo se puede establecer que existe un perro? Bueno, todo lo que se puede decir es que es a lo que se refiere la palabra o concepto, ya sea que lo uses o no, lo etiquetes o no, lo superpongas a algo o no, no importa. Esto también es cierto para un Buda. ¿Qué establece que existan cosas como perros para un buda? Lo mismo, el etiquetado mental, es a lo que se refiere una palabra. Eso es todo lo que puede establecerlo, aunque un buda no lo etiquetaría mentalmente. La mente de un buda no etiqueta las cosas conceptualmente.

Introducción a los contenidos de una cognición conceptual

Pero para comprender realmente lo que sucede con la cognición conceptual en la que percibimos las cosas a través de categorías, tenemos que analizar con mucha más precisión cuáles son en realidad los contenidos de una apariencia conceptual, una apariencia mental con un holograma en una cognición conceptual cuando pensamos “perro”.

Ahora bien, podemos pensar en “perro” al ver este animal y también podemos pensar en “perro” sin ver al animal, ¿no? Y nuestra cognición de ello en ese momento puede ir acompañado de un sonido mental de la palabra o no. Puedes pensar en “perro” sin que una voz mental en tu cabeza diga “perro”. Entonces, aunque aquí hay una categoría de audio involucrada, no tiene por qué ser un sonido mental involucrado. Son diferentes. Entiendo que esta cosa es un perro cuando pienso en ello y, aunque no digo la palabra “perro” en mi cabeza, hay una categoría derivada de una palabra y que tiene un significado.

Los fenómenos estáticos, los fenómenos metafísicos, no tienen las cualidades de estos fenómenos no estáticos. Una categoría no tiene color ni forma; una categoría no tiene olor; no tiene sonido; no tiene sabor; no tiene una sensación física. Una categoría no se da cuenta de nada. ¿Cierto? Es lo que estoy traduciendo como “una entidad metafísica”, no física. ¿Está bien?

Entonces, ¿qué sucede realmente en una cognición conceptual cuando pensamos en “perro”? Piensen en un perro. Bien, ahora ¿cómo analizaríamos lo que apareció en su mente? ¿Cómo analizaríamos esto? Tal vez, en realidad, seamos un poco como un maestro budista y detengámonos por unos momentos y tratemos de analizar lo que realmente aparece en nuestra mente cuando pensamos en un perro. ¿Hay algún perro que aparece? ¿Es un perro específico? ¿Qué clase de perro es el que aparece? ¿La categoría perro solo se refiere a nuestra imagen mental de un perro? ¿En qué piensas cuando piensas en un perro? Es una pregunta interesante, ¿no? Entonces, analizaremos esto y pensaremos en ello durante el almuerzo y luego lo discutiremos.

La transparencia de los hologramas mentales

¿Qué queremos decir con que un holograma mental en la percepción sensorial no conceptual es transparente? Aunque es fácil imaginarlo en términos de ser transparente en una cognición visual, ¿qué significa en términos de los demás sentidos? 

Por ejemplo, tienes un holograma mental del lenguaje cuando escuchas, pero a través de eso es transparente. Transparente, por supuesto, es una palabra que implica lo visual, pero realmente no tenemos una palabra que pueda abarcar todos los sentidos. Sin embargo, a través de eso no bloquea el sonido externo.

Ahora, permítanme presentarles la forma en que lo dicen los no Gelugpas. Dicen que el holograma mental es opaco. ¿Por qué? Porque solo tienes un holograma mental en la percepción sensorial de un momento de información sensorial, información visual o información de audio o lo que sea. Y cuando tengo un holograma mental de eso, ese es el siguiente momento. Y así, el objeto externo del que procede este holograma mental ya no existe. Y entonces ese holograma mental es opaco en el sentido de que no se puede ver ni percibir a través de él aquello que le dio origen. Solo estamos diciendo que aquí hay un momento de información sensorial. Solo dura un momento. Ese es el objeto externo. El siguiente momento del holograma mental de él. Ese holograma mental es opaco, no puedes ver a través de él ese momento anterior al objeto externo porque ahora está el siguiente momento de información sensorial, por lo que es opaco en ese sentido.

Por eso decía que el enfoque Gelugpa implica una conexión más estrecha con el mundo exterior, porque lo que estás percibiendo es un objeto de sentido común que perdura en el tiempo. Entonces, a través del holograma (es transparente), en realidad todavía estás viendo el objeto de sentido común que tiene una continuidad de momentos.

El ejemplo que me viene a la mente –no lo he analizado a fondo, así que discúlpenme si al analizar mi analogía es errónea– cuando escuchamos un mensaje proveniente de Marte, de una de esas sondas espaciales que hay ahí fuera, hay un retraso de tiempo; ha transcurrido un cierto período. Entonces, cuando escuchamos la señal de Marte, bueno, eso no está sucediendo ahora en Marte, ¿verdad? En realidad, no estamos escuchando el sonido en Marte, lo estamos escuchando, tenemos un holograma del mismo, en cierto sentido, otra representación del mismo, a través de la cual no podemos realmente escuchar ese sonido. Esa sería la explicación no Gelug por analogía.

Exactamente lo mismo con las estrellas. Ahora vemos la luz de una estrella y es posible que la estrella ya no exista en absoluto. Esto abre la puerta a una discusión muy, muy amplia sobre: ¿Podemos ver el pasado? ¿Y cuál es la existencia del pasado? No entremos en ese gran tema. Pero para aquellos de ustedes que estén interesados y sean valientes, tengo un artículo muy difícil en mi sitio web. Así que no los engañaré diciendo que es fácil; probablemente sea lo más complicado que he escrito hasta ahora: qué sabe un buda cuando conoce el pasado, el presente y el futuro. Es un tema muy, muy complejo. Ese tema es probablemente uno de los más confusos y desconcertantes del budismo, porque nos da la falsa impresión de que todo ya está determinado, si un buda puede ver el futuro.

Pero desde el punto de vista Gelugpa estamos escuchando el sonido convencional, el sonido de sentido común que proviene de Marte. Y no entramos aquí en una discusión sobre el objeto de sentido común en términos de pasado, presente, futuro, etc., sino que estamos hablando de un continuo que sostiene su propia naturaleza esencial, que sostiene su naturaleza esencial como un artículo individual con una continuidad que escuchamos el sonido en Marte, por supuesto, cuando lo escuchamos a través de esta representación electrónica ocho minutos después o veinte minutos después o por mucho que sea el retraso.

Es lo mismo al hablar por teléfono. ¿Qué estás escuchando realmente? ¿Escuchas el sonido de la otra persona, el sonido de su voz? Bueno, en realidad estamos escuchando la vibración de una especie de membrana que proviene de todo tipo de impulsos eléctricos. Quiero decir, es realmente muy, muy sorprendente, ¿no? Entonces es cierto que el sonido que sale del teléfono, esa representación electrónica, no es la voz de mi amigo hablando al otro lado de la línea. Eso es cierto. El Gelugpa estará de acuerdo en que es verdad. Pero a través de esa representación electrónica escuchamos la voz de la otra persona. Eso es lo que significa ser transparente. ¿Bien?

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