El análisis del karma, la causa y el efecto de la conducta, comienza en el lam-rim con el análisis de los cuatro principios fundamentales del karma. Analizamos cada uno de ellos en profundidad porque es muy importante comprenderlos y tener confianza en que son correctos.
Revisamos:
- La certeza del karma, que consiste en que, si experimentamos infelicidad, es seguro que esa infelicidad es el resultado de un comportamiento destructivo. Si experimentamos una felicidad ordinaria y mundana, es seguro que esa felicidad es el resultado de un comportamiento constructivo mezclado con confusión. Si experimentamos una felicidad eterna y dichosa, etc., es seguro que esa felicidad es el resultado de un comportamiento constructivo y puro, aunque no hemos profundizado mucho en ese último punto.
Para entender cómo es cierto ese principio, analizamos en profundidad la relación entre la infelicidad y la conducta destructiva, porque, a menos que estemos convencidos de que nuestra infelicidad proviene de la conducta destructiva, ¿por qué nos abstendríamos de ella? No es un punto fácil de entender.
Vimos que:
- Los resultados kármicos pueden aumentar porque los resultados no existen ya dentro de la causa. No están simplemente ahí, en nuestra mente, esperando a aparecer. La manera en que los potenciales kármicos acumulados a partir de las acciones kármicas finalmente maduran se ve afectada por todo tipo de variables, todo tipo de cosas que seguimos haciendo.
- No experimentaremos un resultado kármico a menos que hayamos acumulado una causa kármica.
- Si hemos acumulado un potencial kármico, este no se desgastará ni desaparecerá por sí solo, sino que madurará sin duda alguna, a menos que –en el caso de los potenciales negativos– nos purifiquemos de él.
Obtener convicción de que el Buda es una fuente válida de información
El punto que me gustaría abordar esta tarde, antes de entrar en el debate sobre qué es lo que hace que una acción sea destructiva, no es fácil: ¿por qué creemos en el Buda acerca de todos estos puntos relacionados con el karma? Para poder tener confianza en la validez de lo que dijo el Buda, realmente necesitamos examinar muy bien por qué deberíamos creerle. Básicamente, de lo que estamos hablando aquí es de demostrar que el Buda es una fuente válida de información.
Fenómenos obvios, oscuros y extremadamente oscuros
(1) Hay ciertos tipos de fenómenos que son obvios. Podemos verlos, tocarlos, oírlos, etc. Podemos saber con certeza que están ahí simplemente mediante la percepción sensorial válida.
El ejemplo clásico es ver humo saliendo de la chimenea de una casa que está en la ladera de una montaña al otro lado de un valle. Podemos saber que hay una casa allí y que sale humo de la chimenea con solo verlo. Puede que tengamos que ponernos las gafas, pero si no hay ninguna fuente de engaño, como una visión deficiente, o si se elimina (tenemos las gafas adecuadas), entonces podemos ver esas cosas.
(2) Otros tipos de fenómenos son más oscuros. Estos los podemos conocer mediante inferencia; por ejemplo, si comprobamos que hay un incendio en el interior de una casa: donde hay humo, hay fuego.
(3) También hay ciertas cosas que son extremadamente oscuras, como el nombre de la persona que hizo el fuego en la casa. Eso es algo que no podríamos averiguar usando la lógica. Tendríamos que preguntarle a alguien que lo supiera.
El ejemplo que Su Santidad el Dalái Lama siempre utiliza para estos fenómenos extremadamente oscuros es el cumpleaños de una persona. No hay forma de que podamos saber nuestra fecha de nacimiento por nosotros mismos. Tenemos que preguntarle a alguien. Alguien tiene que decírnoslo, y esa persona tiene que ser una fuente válida de información. Es un buen ejemplo.
Entonces, ¿cómo sabemos que el Buda es una fuente válida de información sobre el karma, un fenómeno extremadamente oscuro? Si analizamos estos diversos aspectos del karma (por ejemplo, que ser pobre es el resultado de haber tomado lo que no nos fue dado, de haber robado, etc.), podríamos cuestionar su validez. Entonces, ¿cómo podemos demostrarlo? ¿Cómo podemos saberlo? ¿Deberíamos aceptarlo como cierto solo por la fe?
Existen distintos tipos de fe. El término que a veces se traduce como “fe” es el que yo prefiero traducir como “creer en un hecho como cierto”, porque es a eso a lo que se refiere: a algo que es cierto y que creemos que es cierto como un hecho. No es como creer en Santa Claus o algo por el estilo.
Las líneas de razonamiento utilizadas para obtener convicción
Existen varios argumentos lógicos que se utilizan para convencerse de lo que enseñó el Buda sobre estos fenómenos extremadamente oscuros. Me gustaría explorarlos con ustedes y ver si son convincentes o no.
Un argumento es:
- Si podemos verificar por nosotros mismos que lo que el Buda dijo acerca de las cosas oscuras es verdad, entonces podemos inferir que lo que el Buda dijo acerca de las cosas extremadamente oscuras también debe ser verdad porque el Buda no tenía ninguna razón para mentir o fingir.
Entonces, ¿qué cosas dijo el Buda que son oscuras y que podemos comprobar por nosotros mismos? Se trata de las enseñanzas sobre la vacuidad. Supongamos que analizamos todos los argumentos lógicos sobre la vacuidad y, mediante una lógica válida, nos convencemos de la validez de lo que el Buda enseñó sobre cómo las formas en que las cosas aparecen no corresponden a la forma en que realmente existen y, como resultado, vemos que nuestros problemas y sufrimiento disminuyen. Supongamos que luego logramos una concentración perfecta y una cognición no conceptual perfecta de esta comprensión y, como resultado, vemos que en realidad nos libera de los problemas y el sufrimiento, no solo los disminuye. Si esa es nuestra experiencia, entonces ¿por qué no deberíamos creer lo que el Buda dijo sobre cosas más difíciles y oscuras como el karma?
Otro es:
- La única manera en que el Buda pudo haber llegado a comprender estos fenómenos tan oscuros fue iluminándose. Y la razón por la que alcanzó la iluminación fue su compasión.
Así pues, tendríamos que convencernos de que el poder de la compasión y de la bodichita es capaz de aumentar el poder de la comprensión de la vacuidad, de modo que esa comprensión se deshaga, no solo de los oscurecimientos emocionales sino también de los cognitivos y, de ese modo, permita el logro de la iluminación omnisciente. Y también tendríamos que convencernos de que el Buda tenía la misma compasión por absolutamente todo el mundo (esto lo teníamos en la lista de las cualidades de un buda), ya fuera que alguien lo odiara, lo adorara o fuera un completo desconocido para él, y que, debido a esa compasión, el Buda no tenía ninguna razón para engañarnos. ¿Por qué nos engañaría si todo su propósito en la enseñanza era beneficiarnos?
Examinemos estos dos puntos.
(1) Al haber verificado lo que el Buda dijo acerca de los fenómenos oscuros, inferir que lo que dijo acerca de los fenómenos extremadamente oscuros también es cierto
Empecemos por pensar en las enseñanzas sobre la vacuidad, un fenómeno oscuro. Si podemos demostrar mediante la lógica y la experiencia que son válidas y que producen los resultados que se dice que producen, entonces deberíamos tener confianza en que lo que dijo el Buda sobre otros fenómenos más oscuros, como el karma, también es válido. Piensen en ello. ¿Es realmente convincente?
[meditación]
¿Qué piensan? ¿Pueden creer lo que dijo el Buda?
Participante: Me recuerda a lo que ocurre en la ciencia: no siempre tienes las habilidades matemáticas para derivar una ecuación o un método por ti mismo; no obstante, puedes utilizar los métodos y conclusiones de otros en una investigación. Aunque no seas capaz de entender completamente cómo se llegó a una conclusión, confías en el conjunto de conocimientos. Sabes que es lógicamente coherente y que ha funcionado, y sabes que proviene de personas fiables. Así que, básicamente, confías en eso.
Dr. Berzin: El ejemplo no es exactamente análogo. Podemos confiar en los científicos, pero, al mismo tiempo, no nos dan material que no pueda verificarse. Con el karma es diferente. ¿Cómo podemos verificar el karma?
Participante: Pero podemos comprobarlo.
Dr. Berzin: Bueno, la mayor parte del karma madura en vidas futuras. Hay muy poco karma que creamos en esta vida que realmente madure en esta vida. Si has hecho algo muy fuertemente positivo o negativo hacia aquellos que han sido especialmente amables contigo, como tu maestro espiritual, tus padres, etc., y lo has hecho con una motivación muy fuerte, ya sea positiva o negativa, puede madurar en esta vida. Pero incluso si así fuera, ¿cómo sabes que la causa de ello fue esa acción?
Participante: Se puede verificar de la misma manera que lo hace un científico.
Dr. Berzin: ¿Cómo se verifica el karma?
Participante: Te iluminas y lo verificas.
¿Cómo podemos verificar el karma si no entendemos la vacuidad?
Dr. Berzin: Bueno, esta es la pregunta que me vino a la mente: si no entiendes la vacuidad, ¿cómo puedes verificar el karma?
Puedes usar la lógica para verificar la vacuidad. Entonces, ¿cómo lo verificas? ¿Qué lógica usarías?
Participante: Para poder “verificar” (entre comillas) con la lógica, siempre hay que hacer algunas suposiciones básicas; de lo contrario, no funciona. Por ejemplo, el Buda dijo que comprender la vacuidad ayuda a superar el sufrimiento.
Dr. Berzin: El Buda dijo que comprender la vacuidad no solo ayuda a superar el sufrimiento, sino que realmente sí lo supera.
Participante: De acuerdo. Entonces, ¿cómo superaría el sufrimiento? Bueno, si comprendiera la vacuidad, ya no me aferraría a nada. Pero entonces tendría que convencerme de que el aferramiento es la fuente del sufrimiento. Pero para investigar si eso es así, no puedo pensar solo en términos de esta vida. Eso significa que debo estar convencido de que la conciencia no tiene principio. Y para convencerme de que la conciencia no tiene principio, debo estar convencido de que cada momento de conciencia es precedido por otro. Pero no estoy convencido de eso.
Dr. Berzin: Exacto. Para convencerse de la existencia de vidas pasadas y futuras, hay que convencerse de que cada momento de la mente tiene, como condición inmediatamente precedente, un momento anterior en su continuidad, y eso es algo de lo que no te has podido convencer, aunque existen algunos argumentos lógicos a favor de ello.
Bueno, sí, todo esto es muy cierto. Para convencerse de la vacuidad de algo, primero hay que reconocer cuál es el objeto de la refutación y cómo existe de una manera imposible. Hay que reconocer que lo que aparece es engañoso y ver qué es lo engañoso. Hay que entender la lógica y cómo demuestra realmente que las cosas no existen de la manera imposible en que parecen existir. Esto es parte del análisis de cuatro puntos, que implica reconocer el objeto a ser refutado, entender cómo lo refuta la lógica y luego entender los puntos de la lógica. Y todos los puntos de la lógica se remontan a la mente sin principio ni fin, el renacimiento, etc. Bueno, no es fácil. Por eso digo que no deberíamos basarnos simplemente en “sí, creo en lo que dijo el Buda”. Bueno, ¿realmente crees en lo que dijo el Buda? Y si es así, ¿por qué?
Participante: Supongo que no hay forma de evitarlo: solo obtendrás la convicción final cuando estés iluminado.
Dr. Berzin: ¡Ah! Ahora voy a debatir contigo: ¿Podemos alcanzar la iluminación sin esa convicción?
Participante: Creo que lo que se necesita es tener cierta confianza en ello, porque, en general, la imagen tiene sentido. Así que le damos el beneficio de la duda, como decimos en alemán: “Vertrauenvorschusses”. Lo hacemos porque la imagen general tiene sentido. Pero para tener plena confianza, supongo que hay que esperar hasta la iluminación. Pero es muy frecuente que esto ocurra. Por ejemplo, cuando eres estudiante y empiezas a estudiar los libros del octavo semestre inferior, no entiendes realmente lo que hay en ellos. Dices: “Bueno, sé que ahora no lo entiendo, pero estoy empezando, así que tiene sentido que no lo entienda. Así que seguiré adelante y, finalmente, entenderé más y tendré más confianza en lo que estoy aprendiendo”.
Dr. Berzin: No creo que todo el mundo tenga confianza en que todos los libros de texto enseñen información válida, pero si la tuviéramos, entonces comenzaríamos desde el principio y, con el tiempo, nuestra confianza aumentaría.
Pero hay quienes no están necesariamente dotados para la lógica.
Participante: Sigo un enfoque experiencial del Dharma, que se basa en sentimientos emocionales más que en la comprensión lógica.
Dr. Berzin: Pero ¿por qué crees en lo que dijo el Buda?
Participante: Porque he visto muchos cambios.
Dr. Berzin: ¡Ah! He aquí un punto muy, muy bueno que es cierto tanto desde un punto de vista experiencial como lógico. Has experimentado un cambio, un cambio positivo, en ti mismo, basado en haber puesto en práctica las enseñanzas del Buda. Esa es exactamente la cuestión. Esa es exactamente la cuestión: lo pruebas y funciona.
Pero solo tendrás confianza en ello en la medida en que funcione. Así que, si funciona, digamos, el 50% del tiempo, tendrás un 50% de confianza en ello. Si funciona el 75% del tiempo, tendrás aún más confianza. Sin embargo, creo que, para comprender plenamente las enseñanzas sobre temas como la vacuidad, tienes que tener un 100% de confianza. De lo contrario, hay un poco de duda allí. Si hay un poco de duda, no puedes obtener una absorción completa en ello.
Además, creo que una de las grandes inspiraciones para obtener confianza es ver el ejemplo del maestro, un maestro calificado. Hay mucha gente que dice ser maestro y que tiene muchos seguidores, que no son maestros auténticos. Pero si tienes la suerte de encontrarte con el verdadero maestro, entonces la experiencia puede ser muy inspiradora porque ves qué tipo de persona producen estas enseñanzas. Y si ves a más de uno, te convences de que no es solo esa persona la que es así, sino muchas otras. Te hace pensar: “¡Guau! Si yo pudiera llegar a ser así, aunque no sea perfecto todavía, eso sería suficiente”.
Participante: ¿Es absolutamente necesario creer en el karma para seguir el camino budista?
Dr. Berzin: Bueno, ¿por qué querrías evitar la conducta destructiva? ¿Porque el Buda lo dijo?
Participante: No, porque veo que el comportamiento destructivo resulta en sufrimiento.
Participante: Hay líderes de la mafia que son realmente malvados y que son realmente ricos y poderosos y parecen felices.
Dr. Berzin: Exacto. El karma no es tan obvio. Podrías hacer trampa en tus impuestos o lo que sea y sentirte muy feliz de haberte salido con la tuya. Es posible que no te descubran en toda tu vida.
Apreciar los detalles del karma es muy difícil. Creer que ser pobre es el resultado de no haber sido generoso o de haber tomado lo que no se nos dio y luego cambiar nuestras costumbres con base en esa creencia requiere bastante confianza, ¿no es así? ¿Por qué haríamos eso? Esto es lo que estoy pidiendo que pensemos antes de profundizar en estas enseñanzas sobre el karma.
No es que Dios haya creado estas leyes y que tengamos que seguirlas. No es así. El Buda dijo que hay que entender por qué el comportamiento destructivo conduce a la infelicidad.
Participante: Pero hay personas de otras religiones o personas que no son religiosas en absoluto que también actúan de manera muy ética.
Dr. Berzin: Correcto. Entonces, ¿hay algo diferente en lo que dijo el Buda? ¿Hay algo nuevo en ello? ¿Qué tiene de especial lo que dijo el Buda sobre el karma?
Participante: Es esta cuestión de las vidas futuras.
Dr. Berzin: Bueno, los hindúes y los jainistas creen en vidas futuras.
Participante: ¿La idea jainista o hindú del karma es diferente?
Dr. Berzin: ¿Qué sería diferente? Dímelo tú.
Participante: Creo que es lo mismo, probablemente. La diferencia está en cómo se purifica el karma.
Dr. Berzin: Yo iría más allá: es la explicación budista de la vacuidad del karma, que es lo que hay que entender para comprender cómo funciona el karma (y eso, por supuesto, está relacionado con la forma de purificarse). Por lo tanto, es bastante singular.
En las religiones bíblicas también se piensa que, si uno sigue las leyes y es una buena persona, irá al cielo; si las quebranta, sufrirá. Así pues, la correlación entre la conducta destructiva y la infelicidad está ahí. Sin embargo, la base es diferente: la razón por la que uno sufre. En otros sistemas, ya sean religiosos o civiles, es porque uno es desobediente: no obedece las leyes. En el budismo, sin embargo, es porque uno está confundido: no entiende la causa y el efecto. Así pues, de nuevo, todo se reduce a la causa y el efecto. Y, de nuevo, ¿cómo lo sabemos? Porque el Buda lo dijo.
Yo creo que este es un tema central. ¿Por qué crees en lo que dijo el Buda? ¿Es porque “mi maestro lo dijo y mi maestro cree en ello”? Bueno, ¿crees todo lo que dice tu maestro?
Un ejemplo de las enseñanzas sobre el karma que se encuentran en los textos es el relato de un brahmán que tenía un elefante que defecaba oro. El brahmán trató de deshacerse de este elefante porque todo el mundo lo perseguía para quedarse con el oro. Pero cada vez que regalaba el elefante, el elefante aparecía de repente de nuevo. Salía de la tierra o de lo que fuera. Se leen relatos de ese tipo. Cometí el error de llamarlo "historia" en tibetano, que es la palabra para una historia de ficción. Serkong Rinpoche me reprendió con bastante severidad. Dijo: "No, no es una historia de ficción: ¡es un relato! Lo encuentras en los textos". Entonces, ¿qué piensan de eso? Nuestros maestros creen en estas historias de manera bastante literal.
Participante: Incluso algunas de las enseñanzas del Buda se toman literalmente.
Dr. Berzin: Así es. Sin embargo, otras no lo son. Deben ser interpretadas.
Entonces, ¿qué dirían? ¿Que estas enseñanzas están destinadas a gente de mente simple y que no las necesitamos? Eso es bastante arrogante, ¿no?
Participante: Eso implicaría que Serkong Rinpoche era de mente simple.
Dr. Berzin: Correcto. Ahora la cosa se pone muy interesante. ¿Qué quiso decir Serkong Rinpoche con lo que dijo? ¿Era solo de mente simple? ¿Creía que ese elefante defecaba oro y salía de la tierra cada vez que el brahmán intentaba deshacerse de él? ¿O me estaba enseñando a no ser tan arrogante? Tiendo a pensar lo segundo porque cuando fui a verlo por primera vez, ¡era un joven bastante arrogante!
Eso afecta toda la relación con el maestro espiritual. No importa lo que haga –y siempre que sea un maestro espiritual verdadero y calificado–, trata de ver qué lección está tratando de enseñarte. No puedes simplemente criticarlo y decir que es estúpido y simple.
Participante: Creo que este tipo de historia se puede interpretar en distintos niveles. Uno es didáctico, para enseñar. Otro es simbólico, podría representar otra cosa. Otro podría ser que se trata de una historia real de otro tiempo o de otro mundo en el que este tipo de cosas pueden suceder. ¿Cómo podemos saberlo?
Dr. Berzin: Ese es un muy, muy buen punto.
Siempre me ha parecido maravilloso lo que decían Serkong Rinpoche y muchos de mis maestros, que es que usar la razón de “no lo creo” como razón para no creer en algo no es válido. “No lo creo” no es una razón válida. ¿Y qué si no lo crees? ¿Y qué? Eso no prueba nada.
Bien. Aplicar las enseñanzas sobre la vacuidad, aunque no sea a un nivel muy profundo, e intentar deconstruir el fuerte sentido del yo, yo, yo – “Tengo que hacer las cosas a mi manera. Tengo que tener razón. Soy lo más importante”– sin llegar, por supuesto, al extremo de “no soy nada”, puede ayudar mucho. No nos enojamos tanto. Y si nos enojamos, somos capaces de superarlo muy, muy rápidamente. Además, no somos tan codiciosos ni egoístas. Y tendemos a ser más compasivos y comprensivos con los demás –al menos a ser más pacientes con ellos–. Así pues, podemos comprobar que las enseñanzas sobre la vacuidad son válidas, al menos en la medida en que podemos establecer que la comprensión de la vacuidad disminuye nuestro sufrimiento.
Sin embargo, no es que seamos felices de inmediato. No hay karma instantáneo. No obstante, tenemos menos problemas y tenemos más ecuanimidad. Creo que la razón por la que no somos felices de inmediato es porque hemos acumulado mucho karma negativo en el pasado. Ese karma todavía está madurando y nos hace sentir infelices o, al menos, no muy alegres. Aun así, no estamos tan perturbados. Estamos más tranquilos.
Luego podemos examinar más a fondo: ¿cuándo soy más feliz? En mi caso, me parece que, por lo general, soy más feliz cuando realmente ayudo a los demás. Cuando estoy solo, esa suele ser la oportunidad o la circunstancia para que madure el karma antiguo de la infelicidad.
(2) Debido a su compasión, el Buda no tenía motivos para mentir
Esto nos lleva al otro punto, que tiene que ver con la compasión: el Buda no tenía ninguna razón para mentirnos acerca de estos fenómenos extremadamente oscuros o inventarlos debido a su compasión. ¿Por qué el Buda inventaría estas cosas si realmente tenía una compasión total? No podría haberse convertido en Buda sin esa compasión. Así que pensemos en eso.
Participante: No estoy muy contento con esta línea de razonamiento. El primer punto era que, puesto que las enseñanzas del Buda sobre la vacuidad son correctas, puedo suponer que las enseñanzas sobre el karma también lo son. Tampoco estoy contento con ese punto. Einstein, por ejemplo, tenía razón sobre la teoría de la relatividad, pero no tenía razón sobre los puntos relacionados con la teoría atómica.
Dr. Berzin: Entonces, solo porque estaba en lo cierto sobre una cosa, no significa que vaya a estar en lo cierto sobre otra cosa.
Participante: En el caso de la línea de razonamiento relacionada con la compasión, hay que suponer que el Buda enseñaba por compasión. Si no se supone eso –tal vez solo estaba presumiendo o algo así–, el argumento no es convincente.
Dr. Berzin: ¿Cómo sabemos que el Buda tenía la misma compasión por absolutamente todo el mundo? Es posible que estuviera enseñando solo para demostrar lo inteligente que era. Bueno, repito, el Buda no podría haberse iluminado sin esa compasión. Si no aceptamos esa suposición, entonces ese argumento no nos convencerá.
Participante: La línea de razonamiento que me funciona es la siguiente: si tuviera una mejor comprensión de la vacuidad y estuviera convencido de que es posible alcanzar la iluminación y desarrollar una mente que sea realmente omnisciente, entonces podría imaginar que existen seres iluminados y que ellos enseñarían a otros cómo alcanzar la iluminación. Usando esta línea de razonamiento, puedo imaginar que existen seres iluminados.
Dr. Berzin: La línea de razonamiento que estás utilizando es que, si uno puede convencerse a través de la lógica y la experiencia de que, con la comprensión de la vacuidad, puede alcanzar la iluminación y volverse omnisciente –y puede demostrarlo–, entonces se deduciría que, como el Buda era omnisciente, lo que dijo sobre todo era correcto.
Sin embargo, tengo que preguntarte: ¿es suficiente la comprensión de la vacuidad para alcanzar la iluminación?
Participante: No, también se necesita compasión.
¿Por qué necesitamos compasión para comprender la vacuidad y alcanzar la iluminación?
Dr. Berzin: ¿Por qué? Esta es exactamente la pregunta que estamos planteando. ¿Por qué es necesaria la compasión? ¿Qué aporta a la comprensión de la vacuidad?
Participante: Sin compasión, no habría razón para querer comprender completamente todos los fenómenos convencionales.
Dr. Berzin: Eso significaría que todos los científicos que realizan experimentos con este acelerador de partículas en Suiza para tratar de comprender toda la realidad física y el Big Bang necesariamente tienen compasión.
Participante: No me refería a eso. Me refería a que es necesario comprender por completo la realidad convencional para poder beneficiar a los demás.
Dr. Berzin: Pero ¿no podría uno querer comprender la realidad convencional por completo solo porque es interesante o solo porque quiere ganar un Premio Nobel? Seguramente, podría haber otros motivos para querer hacerlo.
Participante: Sí, podría haberlo, pero no tendrías éxito porque para lograr una comprensión de la vacuidad, necesitas compasión.
Dr. Berzin: ¿Necesitas compasión?
Participante: No necesariamente, pero ayuda. Purifica la mente, por lo que es más fácil comprender la vacuidad.
Dr. Berzin: ¡Ah! ¿Cómo? ¿Por qué?
Participante: Calma la mente.
Dr. Berzin: Entonces, ¿es un tranquilizante?
Participante: No. Tranquiliza la mente, estás menos obsesionado contigo mismo. Así que todo resulta más fácil.
Participante: Quería decir lo mismo: que cuando tienes compasión, te abres a los demás y eres capaz de ver la interconexión con los demás como algo más real.
Dr. Berzin: Creo que vamos en la dirección correcta. Cuando piensas solo en ti mismo, estás muy, muy cerrado. Tu corazón está cerrado y tu mente también. Cuando piensas en los demás, tu corazón y tu mente están abiertos. Cuanto más abiertos estén, más receptivos serán a la comprensión.
Estaba pensando un poco en lo que dije antes sobre cuándo te sientes feliz y cuándo te sientes infeliz. Para que la felicidad y la infelicidad maduren, necesitas circunstancias. Entonces, ¿cuáles son las circunstancias para que maduren? Como dije, creo que una de las circunstancias tiene que ver con si eres compasivo o no. Cuando eres compasivo o al menos intentas ayudar a los demás y estar con ellos de una manera compasiva, tu mente y tu corazón están más abiertos. Eso, creo, actúa como una circunstancia para que maduren los potenciales de la felicidad. Por otro lado, cuando estás sentado solo frente a la computadora o haciendo cualquier trabajo que puedas estar haciendo, pensando: "Uf, tengo que hacer esto. Tengo que hacer aquello", estás más cerrado. Y eso, creo, actúa como una circunstancia para que madure la infelicidad. De manera similar, cuanto más abierto seas -con compasión-, más fácil es, creo, entender las cosas. Entonces, para entender todo, tendrías que estar infinitamente abierto.
Participante: Por otro lado, puedes sentarte solo y ser muy feliz porque la mente está realmente tranquila.
Dra. Berzin: Exacto. Hay otro tipo de felicidad que ella señala, y es muy correcto, que es la felicidad que se obtiene cuando se alcanza el shámata, la mente completamente tranquila y estable. Con shámata, se obtiene esta exuberante sensación de flexibilidad mental, aptitud mental. Ese es un tipo diferente de felicidad.
¿Esa maduración se debe al karma? No, no es felicidad kármica, ¿o sí? ¿Está relacionada con el karma? Eso es algo que hay que analizar.
Participante: Es el resultado kármico del acto de meditación.
Dr. Berzin: Recuerden, los efectos no surgen de una sola causa. Por un lado, la felicidad experimentada con un estado de shámata es el resultado creado por el hombre a partir de la meditación. Pero, por otro lado, también se podría analizar que es también la maduración del potencial positivo de acciones constructivas previas. Después de todo, no se podría alcanzar un estado de shámata si no se hubiera acumulado suficiente potencial positivo.
Pero piensen en esto: si estás sentado solo y piensas en un chiste o en algo gracioso, te ríes. Estás feliz. O puedes recordar algo realmente agradable que te pasó en la vida y experimentar felicidad. Por eso no creo que ser compasivo, pensar en los demás, sea la única razón para que madure la felicidad.
Participante: Lo que me vino a la mente fue la línea de razonamiento de que, si entendiéramos la vacuidad, obtendríamos confianza en que el Buda era una autoridad válida y eso nos permitiría trabajar hacia la iluminación. Pero cada persona es diferente, por lo que tenemos estos dos tipos de bodisatvas, estas dos formas de proceder. Un tipo comprende primero la vacuidad; el otro desarrolla primero la bodichita.
Dr. Berzin: Exacto. Hay bodisatvas que primero desarrollan la compasión, aunque para empezar tienen un poco de comprensión de la vacuidad. A partir de esa compasión, se dan cuenta de que tienen que adquirir una comprensión de la realidad, de la vacuidad, para saber cómo ayudar mejor a los demás. Hay otros que primero comprenden la vacuidad. De esa manera, se convencen de que la liberación y la iluminación son posibles. Una vez que tienen la convicción obtenida a partir de la comprensión de la vacuidad, pueden desarrollar la compasión con mucha más facilidad. Sin esa comprensión, la compasión solo equivale a desear el bien a los demás sin que haya ninguna esperanza real de poder ayudarlos. Sin duda, existen estas dos formas, pero todo el mundo estaría de acuerdo en que para alcanzar la iluminación se necesita la comprensión de la vacuidad, la compasión y la bodichita.
¿Por qué necesitamos compasión para ser una fuente válida de información sobre el karma?
¿Están convencidos de que las siguientes líneas de razonamiento son válidas: “El Buda es una fuente válida de información sobre el karma porque no tenía motivos para mentir; y no tenía motivos para mentir porque tenía el nivel de compasión necesario para alcanzar la iluminación y, con ese nivel, nunca mentiría”? ¿Creen que el Buda tenía ese nivel de compasión?
Participante: No me convenció el argumento sobre la compasión del Buda porque me pareció muy circular: es decir, que el Buda tuvo que tener compasión para alcanzar la iluminación, por lo tanto, no nos mentiría sobre cuestiones como el karma porque era muy compasivo. Pero luego pensé en mi maestro Dhargey Rinpoche, que creo que es muy compasivo y bondadoso. Y pensé: ¿por qué demonios nos mentiría?
Participante: Podría ser porque no lo sabe.
Participante: Bueno, ese es el dilema.
Dr. Berzin: Exacto. Puede ser que esté equivocado y que no mienta a propósito.
Participante: Al menos estoy convencida de que no mentiría a propósito. Eso es una ayuda.
Dr. Berzin: Entonces, ¿cómo sabría si entiende correctamente las enseñanzas del Buda?
Participante: No lo sé.
Dr. Berzin: Entonces, una vez más, ¿nos vemos obligados a volver a actuar solo por fe, sin tener ninguna razón?
Participante: Me recuerda una historia de Dostoievski que estudiamos en la clase de religión en la escuela, la historia de los hermanos Karamazov. Hay una parte famosa en la que el inquisidor le dice a una persona en prisión que todo fue inventado por la Iglesia Católica: no hay resurrección, ni más allá, ni cielo, ni infierno, ni nada por el estilo. Vienes de la nada y volverás a la nada. La Iglesia simplemente inventó todo por compasión para ayudar a las personas a salir adelante en sus vidas. Es una historia famosa.
Dr. Berzin: Esa es una buena pregunta. Entonces, tal vez el Buda inventó todo esto (karma, etc.) por compasión para ayudarnos. Pero incluso si lo inventó, ¿nos ayuda?
Participante: Sí.
Dr. Berzin: ¿Incluso las enseñanzas sobre el karma? ¿Incluso cuando dicen que hay que abstenerse de toda conducta destructiva?
Participante: La última vez dijiste que cualquier infelicidad proviene de acciones destructivas y que cualquier felicidad proviene de acciones constructivas.
Dr. Berzin: Eso es lo que dijo el Buda. Es el primer principio del karma.
Participante: Estoy convencido de ello. También estoy absolutamente convencido de que fumar, por ejemplo, me va a causar sufrimiento en el futuro, pero lo hago de todos modos.
Dr. Berzin: Eso indica que el simple hecho de saber no es suficiente. ¿Qué sería suficiente para que dejaras de hacerlo?
Participante: Un factor emocional.
Dr. Berzin: Un factor emocional, es decir, compasión. Permíteme darte un ejemplo, una historia que mi madre siempre me contaba. Su padre fumaba. Cuando ella era niña, le decía: “Ven y siéntate en mi rodilla”, y luego la abrazaba o algo así. Mi madre le decía: “Oh, no quiero sentarme en tu rodilla. Hueles muy mal por fumar tabaco”. Esto hizo que dejara de fumar. “Si mi propia hija no quiere sentarse en mi rodilla por el terrible olor del tabaco, ¿por qué fumar?”.
La compasión por los demás (pensar no solo en cómo hueles, sino también en cómo el tabaco puede acortar tu vida y limitar así tu capacidad de ayudar a los demás) podría ser una motivación mucho más fuerte para dejar de fumar que el hecho de saber que es malo para tu salud. De lo contrario, podrías decir simplemente: “Bueno, es mi salud. Puedo hacer lo que quiera. Es mi cuerpo”.
Así, empezamos a ver la fuerza de la compasión para superar obstáculos e impedimentos: no basta con comprender. Es un buen punto, ¿no? Pensémoslo.
[meditación]
Además, un último punto es que el Buda dijo: “Nunca creas lo que digo solo por fe en mí. Pruébalo tú mismo, como si estuvieras comprando oro”. Esto también se aplica a las enseñanzas sobre el karma. Aunque no podemos demostrar realmente la relación entre ser pobre y robar, sí tiene sentido. He tomado de otros lo que no me pertenece; por lo tanto, no soy capaz de conservar las cosas. Las pierdo, o me roban. O no consigo lo que quiero o necesito. Así que empezamos a pensar que las enseñanzas sobre el karma no son escandalosas, que sí tienen sentido.
Y aunque no podamos demostrar realmente estas enseñanzas, tenemos suficiente respeto por el Buda como para al menos concederle el beneficio de la duda. Creo que el respeto es un factor importante en este caso. Estaba pensando en mis maestros, los grandes maestros: cuando un gran maestro nos da un consejo, como “Deja de hacer eso”, una de las razones para seguir ese consejo es que le tenemos mucho respeto. No es que le tengamos miedo ni nada por el estilo. Más bien, es porque les tenemos tanto respeto que les creemos y queremos seguir su consejo. Ese tipo de dinámica personal puede ser muy difícil de desarrollar con el propio Buda. Esa es una de las razones por las que se subraya la importancia del maestro: porque podemos tener una dinámica personal con él, al menos hasta cierto punto. Creo que este es otro factor para obtener confianza en las enseñanzas.