Definir el tantra en términos de base, camino y resultado
Estoy encantado de estar aquí y de tener esta oportunidad de hablar con ustedes sobre acercarnos al Vajrayana como occidentales. Esta es siempre una pregunta interesante. ¿Existe realmente una diferencia entre abordarlo como occidentales o abordarlo como cualquier persona, como ser humano? Dejando eso a un lado (el asunto de si somos especiales y necesitamos una forma especial de entrar en él) primero necesitamos ver qué es realmente el tantra.
La palabra “tantra”, traducida al tibetano como rgyud, significa un flujo de continuidad, uno que continúa para siempre. Podemos hablar de esto desde el punto de vista de la base, desde el punto de vista del camino y desde el punto de vista resultante o del resultado.
La base: transformar los factores de la naturaleza búdica
En el nivel base, estamos hablando de la continuidad de los factores de la naturaleza búdica, los cuales no tienen principio y continúan y continúan hasta que se transforman en la budeidad. Sin embargo, no es inevitable que lo hagan. Tenemos que esforzarnos mucho en esto. Cuando hablamos de los factores de la naturaleza búdica, estamos hablando específicamente de aquellos factores que se transformarán en los Cuerpos de un buda. En otras palabras, estos son los materiales de trabajo que nos permitirán convertirnos en un buda y que se transformarán en el cuerpo y la mente de un buda.
¿A qué nos referimos realmente? Es lo que generalmente se llama las dos “colecciones”. Prefiero llamarlos los “dos entramados”. No es como si estuviéramos coleccionando sellos o algo así. Son entramados de lo que se suele traducir como “mérito” y “sabiduría”. Sin embargo, prefiero “fuerza positiva” y “conciencia profunda” por varias razones. Estamos construyendo una fuerza positiva, como la carga de una batería, a partir de las cosas constructivas o positivas que hacemos. En el nivel de la base, estos dan surgimiento al cuerpo y la mente de futuros estados samsáricos, a lo que estamos experimentando ahora y lo que experimentaremos en vidas futuras. Esta es la base; es samsara y renacimiento incontrolablemente recurrente, y esto es lo que continuará para siempre a menos que hagamos algo para ponerle fin.
En términos de los factores de la naturaleza búdica, también tenemos la naturaleza convencional y más profunda de la mente, que también nos permitirá convertirnos en un buda. Son la base del samsara y el nirvana.
El camino: figuras búdicas
En el camino, lo que hacemos en el tantra es tratar de tener, surgiendo de estos entramados, el cuerpo y la mente de una deidad, un yidam, lo que yo llamo una “figura de buda o figura búdica”. Estas son también cosas que pueden continuar como un flujo eterno de continuidad. Las figuras búdicas no cambian de forma; por ejemplo, Chenrezig no envejece, no necesita comer ni nada de eso. Chenrezig es algo que persiste con continuidad. La mente de Chenrezig sería una mente que tiene una comprensión de la bodichita, la vacuidad o vacío, etc. Este es el tantra o continuidad del camino.
El resultado: los cuerpos y la mente de un buda
En el nivel resultante, tenemos la continuidad interminable de los Cuerpos de Forma y los Cuerpos de Dharmakaya de un buda. Esto también es algo que continuará sin fin.
Para repasar, este es el significado del tantra cuando lo vemos en la forma estándar de entenderlo en términos de base, camino y resultado.
Definir el tantra como un telar
Sin embargo, el tantra también tiene un segundo significado proveniente del sánscrito, que lo define como un telar en el que tejemos muchas cosas. Un telar es con lo que tejemos una alfombra o tela. Estas prácticas que hacemos en el tantra son cosas que nos permiten entretejer todos las diversos entendimientos profundos y comprensiones que hemos desarrollado en el camino del sutra, y eso está representado por las figuras búdicas.
Las figuras búdicas son como infografías en las que cada uno de los brazos, rostros, piernas y lo que sostienen representan diferentes niveles de significado. Por ejemplo, los cuatro brazos de Chenrezig, Avalokiteshvara, son las cuatro actitudes inconmensurables: amor, compasión, gozo y ecuanimidad.
Lo que intentamos hacer en el tantra es unir todo lo que hemos aprendido y dominado, hasta cierto punto, en el sutra. Todo se ensambla en un estado mental. Esta es una de las razones por las que el tantra está bastante avanzado. Es extremadamente difícil de hacer si no nos hemos entrenado ya muy bien en todos los diferentes aspectos de lo que hemos aprendido en el sutra.
Sutra y Tantra como caminos causales y resultantes
Práctica causal: Sutra
Otra forma de explicar el tantra en oposición al sutra es que el sutra se describe como el camino causal y el tantra como el camino resultante. En otras palabras, en las prácticas de los sutras ponemos nuestro énfasis en las causas para obtener los Cuerpos de un buda. Por ejemplo, si revisamos los 32 signos principales y los 80 signos menores de un cuerpo de forma de un buda y aprendemos las prácticas que son las causas de cada uno de ellos, entonces, al enfocarnos en una representación de buda, podemos enfocarnos en todas las prácticas causales que conducen a los diferentes aspectos resultantes de un Cuerpo de Buda. Por lo tanto, incluso en el sutra tenemos una forma de infografía, si realmente queremos ver estos signos mayores y menores en un nivel no superficial.
Por ejemplo, un buda tiene una lengua muy larga, y esto es representativo de cuidar a los demás con tanto afecto y dedicación como lo hace una madre animal cuando lame a sus crías. Para representar esta causa, un buda tiene una lengua larga. Si somos conscientes de todos estos 112 factores (32 signos mayores más 80 signos menores) de un buda, de hecho, son incluso más complicados que las diversas características de un yidam real.
En la práctica del sutra, entonces, estamos enfatizando las causas, como el afecto por los demás, como el que una madre animal tiene por sus crías, como una forma de obtener el cuerpo y la bondad de un buda. Este es un ejemplo de la práctica causal del sutra.
Práctica resultante: Tantra
El tantra, por otro lado, es la práctica resultante porque ya nos imaginamos como un yidam o figura búdica. No me gusta usar tanto la palabra “deidad” porque esto trae a colación todo tipo de asociaciones, ya sea de un dios creador o de los antiguos dioses griegos o hindúes, que no son en absoluto la asociación que queremos mencionar cuando se piensa en estos yidams.
Es muy interesante cómo se tradujo la palabra “yidam”. Con yidam en tibetano, el yi es para la mente, y dam es de damtsig -en sánscrito, samaya-, que es algo que hace una asociación cercana para que nuestra mente alcance el cuerpo y la mente de un buda. Eso es un yidam. En sánscrito lo llaman iṣṭadevatā. Devatā es una deidad; es por eso que generalmente se traduce de esa manera, pero no es exactamente la misma palabra que los dioses en el monte Meru. Iṣṭa significa lo que se desea, en el sentido de que su estado es lo que deseamos alcanzar. Esta es la forma en que se deriva el término en sánscrito.
Tenemos estas figuras búdicas, yidams, y en la práctica del tantra imaginamos que ya hemos surgido en esa forma de figura búdica, una figura iluminada, al tiempo que sabemos muy bien que todavía no hemos llegado a ese punto. No es una especie de alucín esquizofrénico. No es como si alguien estuviera corriendo diciendo que es Tara o Chenrezig. Se basa totalmente en una comprensión correcta y en la generación previa de la bodichita.
¿Qué es la bodichita? La bodichita es una mente dirigida a nuestra propia iluminación futura, que aún no hemos alcanzado, pero que podemos alcanzar sobre la base de estos factores de naturaleza búdica. Estamos viendo hacia adelante en la línea de nuestro continuo mental hasta un punto en el que aún no ha sucedido, pero que puede suceder si nos esforzamos por alcanzar la budeidad. Estos entramados, de los que hablamos como base, pueden transformarse en los Cuerpos de un buda.
Además, estamos imaginando que ya estamos allí, pero somos plenamente conscientes de que todavía no ha sucedido. Es muy importante saber que puede suceder. Entonces, surgimos en este tipo de forma. Esto es lo que se conoce como el “estado resultante” o el tipo de práctica “resultante”. A pesar de que no hemos alcanzado la mente completa de un buda donde se eliminan todos los oscurecimientos, donde tenemos una cognición no conceptual de las dos verdades al mismo tiempo, vacío o vacuidad y apariencia pura al mismo tiempo, tenemos algo que, como camino, se transformará en ellos.
No es que pretendamos tenerlos sobre la base de nada. Tenemos que imaginar que tenemos el cuerpo y la mente de un buda sobre la base de algún nivel de generación de la bodichita y la comprensión de la vacuidad. La bodichita está sustentada en la compasión y el amor, etc. Este es el camino resultante. Es muy importante comprender esto.
La creencia en el renacimiento divide el “Dharma-light” y el “Dharma auténtico”
Este es el problema que surge cuando preguntamos si existe una forma especial de practicar el Vajrayana para los occidentales. ¿Cómo nos acercamos a él como occidentales? La mayoría de nosotros realmente no tenemos los antecedentes culturales que nos darían el sustento para creer automáticamente en el renacimiento, las vidas pasadas y futuras. Sin embargo, cuando revisamos las enseñanzas auténticas del Dharma, la línea divisoria entre si estamos haciendo algo mundano o algo dhármico es si estamos haciendo o no algo para nuestras vidas futuras. Está muy claro que enfocarse en las vidas futuras se considera el punto de partida para una práctica de Dharma.
Aquí estamos como occidentales, y somos muy escépticos sobre el renacimiento, en el mejor de los casos, en lugar de ser antagónicos y decir que es una tontería y rechazarlo totalmente. Esto nos lleva a lo que he acuñado como frases “Dharma-light y Dharma auténtico”. Defino Dharma-light como una práctica del budismo que tiene como único objetivo mejorar esta vida. Si examinamos con sinceridad si realmente estamos practicando el Dharma para mejorar vidas futuras, muchos de nosotros encontraríamos que, aunque podríamos decir que lo estamos, en el fondo no sentimos esto en un nivel o estado emocional instintivo.
Eso está bien si es el nivel en el que estamos. Ciertamente, podemos beneficiarnos mucho de la práctica budista. Sin embargo, debemos reconocer que el Dharma auténtico incluye la imagen completa de las vidas futuras.
Las vidas futuras son muy importantes cuando hablamos sobre los tres niveles de anhelo o motivación tal como se presentan en el lam-rim, las etapas graduales del camino. El nivel inicial es mejorar las vidas futuras. En este contexto, toda la comprensión del karma se basa en el renacimiento porque la mayoría de las cosas que hacemos en esta vida en realidad no maduran en esta vida. Por ejemplo, ¿por qué los increíbles altos lamas, yoguis y maestros del Tíbet fueron arrojados a campos de concentración cuando los chinos llegaron al Tíbet? Eso se vuelve muy difícil de entender. ¿Por qué algunos dictadores cometen todo tipo de atrocidades y, sin embargo, viven una vida de lujo? Por lo tanto, nuevamente, sin pensar en términos de renacimiento y las consecuencias a largo plazo de lo que hacemos, toda la presentación del karma se vuelve muy problemática.
El nivel intermedio es alcanzar la liberación. Sin embargo, ¿liberación de qué? Del renacimiento incontrolablemente recurrente. Cuando revisamos los doce eslabones de surgimiento dependiente, ¿qué están describiendo? Están describiendo cómo funciona el renacimiento samsárico, cómo revertirlo y obtener la liberación de él. Entonces, el nivel intermedio, como el nivel inicial, también se basa en la creencia en el renacimiento.
En el nivel avanzado, el objetivo es alcanzar la iluminación para ayudar a todos a superar el renacimiento incontrolablemente recurrente, el samsara. Este es el Dharma Auténtico. Hacemos esta diferenciación.
Lo importante como practicantes del Dharma-light es que reconocemos que no es lo auténtico. No reducimos las enseñanzas budistas a algo que mejore esta vida. Decimos que no entendemos del todo el renacimiento, pero estamos abiertos a la idea a medida que desarrollamos nuestra comprensión. Lo examinaremos de nuevo. Dejamos la puerta abierta y la respetamos; sin embargo, reconocemos que aún no hemos llegado a ese punto.
Eso está perfectamente bien y, siendo completamente honestos, nos permite crecer con el Dharma y pensar más y más profundamente a medida que avanzamos. Podemos examinar si estas enseñanzas sobre el renacimiento tienen algún sentido. Solo tendrán sentido si comprendemos la vacuidad de la identidad de una persona y la vacuidad de causa y efecto. De lo contrario, estamos pensando en el renacimiento de una manera que los budistas rechazarían. Esto sería que tenemos un alma que viaja de un renacimiento a otro; un “yo” o una identidad que es algo sólido, como pensar que ahora soy Alex y que Alex renacerá próximamente como Fifí, el caniche. Esto no es exactamente lo que aceptaría el budismo. Para empezar, está bien tener solo una comprensión aproximada de la vacuidad, pero es importante saber que es muy avanzado para nosotros comprender realmente todo el proceso de renacimiento.
Presentación de Su Santidad el Dalái Lama de los tres aspectos del budismo
Esta presentación de Dharma-light y Dharma auténtico encaja muy bien con el enfoque que Su Santidad el Dalái Lama tiene, al hablar del budismo en términos de tres aspectos. Dice que existe una ciencia budista que se ocupa de la teoría de la percepción, la presentación de la lógica, la presentación de universos múltiples y sin principio, etc. También existe la filosofía budista que aborda la comprensión completa de la vacuidad y, en particular, cómo muchas de estas enseñanzas se acoplan muy de cerca con la física cuántica y los descubrimientos y consecuencias de la física cuántica. El tercer aspecto es la religión budista y es allí donde tenemos el renacimiento y todos los tipos de prácticas devocionales.
Cuando hablamos en términos de ciencia budista y filosofía budista, estas son cosas que están abiertas a cualquiera y pueden beneficiar a cualquiera. Esto encaja muy bien con el Dharma-light. Cuando pasamos a la religión budista, se convierte en lo auténtico. Por lo tanto, con esta forma de dividir las enseñanzas usando esta visión o explicación de tres partes que usa Su Santidad, el Dharma-light y el Dharma auténtico son bastante armoniosos entre sí.
Ngondro es la base del tantra
Ya sea que seamos practicantes de tantra-light o del tantra auténtico, es esencial que practiquemos el ngondro o prácticas preliminares. Ngondro es la base o fundamento del tantra. Esto lo encontramos en cualquier presentación del tantra. No hay razón para descartarlo o ignorarlo como occidentales. A menudo, como occidentales, por supuesto, queremos obtener las cosas en oferta. Regateamos a las enseñanzas: ¿podemos solo hacer ciertas repeticiones de las prácticas ngondro en lugar de tantas otras? Sin embargo, esta no es realmente la forma más beneficiosa de practicar.
Prácticas preliminares comunes y no comunes
Si vemos la palabra “ngondro”, es literalmente algo que viene antes, como una preparación para algo que sigue. Hay dos aspectos de ello: los preliminares comunes y no comunes.
“Común” a veces da una connotación incorrecta de que son ordinarios o que solamente los “plebeyos” los practican, como si fuéramos nobles. Creemos que no los necesitamos; en realidad, el término traducido aquí como “común” significa “compartido”. Es lo que comparten el sutra y el tantra. Las prácticas no comunes o no compartidas son aquellas prácticas que están diseñadas específicamente para el tantra, aunque también son muy útiles para el sutra.
Cómo contrarrestar los estados mentales negativos y el comportamiento destructivo
El problema, si lo pensamos bien, es que tenemos vidas sin principio. Este es el Dharma auténtico. Pero incluso si pensamos solo en términos de esta vida, hemos vivido bastantes años antes de involucrarnos en cualquier tipo de práctica de tantra. Eso significa que hemos desarrollado un tremendo hábito de pensar de forma negativa o ignorante, formas que no concuerdan con la realidad. Estamos tan atrapados en nuestras fantasías, proyecciones, egoísmo, egocentrismo, ira y todo tipo de emociones perturbadoras. Esto es algo muy arraigado en nosotros. Tenemos que desarrollar hábitos nuevos y mejores si queremos tener éxito con el tantra.
Una de las pautas muy útiles que dan algunos de los grandes maestros es examinar nuestra vida y considerar cuántos estados mentales negativos y acciones dañinas y destructivas hemos realizado durante toda nuestra vida. ¿Cuántas veces le hemos gritado a alguien, hemos perdido los estribos, nos hemos aferrado, codiciosos y egoístas, etc.? Comparemos eso con la cantidad de veces y la cantidad de tiempo que hemos pasado en esta vida siendo positivos y constructivos, con la mente clara, amorosa y cariñosa, etc. Entonces, tendremos una idea de lo que nos depara el futuro.
Siempre asumimos, incluso si aceptamos el renacimiento, que por supuesto siempre vamos a ser un ser humano. Nunca consideramos ser un pollo o una cucaracha en nuestra próxima vida. Si pensamos en términos de recordar vidas pasadas, siempre son como seres humanos. No recordamos ninguna vida pasada como cucarachas. Es muy extraño que pensemos que siempre somos humanos. Este es el problema.
Tenemos un hábito tan fuerte de ser egocéntricos y tener formas de pensar improductivas que debemos contrarrestar eso. ¿Cómo podemos contrarrestar eso si hemos tenido millones de repeticiones de pensamientos egoístas o de perder los estribos incluso en esta vida? Necesitamos construir de alguna manera una fuerza muy positiva para contrarrestar eso, de modo que en lugar de estar instintivamente enojados, molestos o preocupados cuando enfrentamos una situación desafiante, la abordemos automáticamente con paciencia, compasión y cuidado por los demás.
La importancia de la repetición
Incluso si hablamos en términos de un enfoque científico de la construcción de nuevas vías neuronales, ¿cómo lo hacemos? Lo hacemos por repetición, de la misma manera que aprenderíamos a tocar un instrumento musical. Repetir algo 100.000 veces en comparación con la cantidad de veces que hemos perdido los estribos en nuestra vida es solo un comienzo, en realidad. Sin embargo, comenzamos a apreciar la importancia de la repetición. La repetición no solo significa decir “bla, bla, bla”. Si en realidad no hemos desarrollado un estado mental adecuado, entonces entrenar nuestra boca para repetir algo 100.000 veces no supondrá una gran transformación.
Una de las palabras para una sadhana, estas prácticas que hacemos en el tantra, es “dagkye” (bdag-bskyed) en tibetano. Esto significa una generación de uno mismo. Mi maestro, Serkong Rinpoche, siempre dijo que es una autogeneración; no es una generación de voz, “kakye” (bka'-bskyed). No es una generación de boca en la que estamos generando que nuestra boca diga algo en estas prácticas. Estamos trabajando para mejorar nuestro yo, trabajando en nuestra mente; esto es lo que está involucrado.
Si pensamos solo en términos de 100,000 repeticiones de los ngondro o preliminares no compartidos o no comunes, como hacer 100,000 postraciones o 100,000 mantras de Vajrasatva, etc., y no pensamos en los mismos términos con los preliminares comunes, entonces nos estamos cambiando poco a nosotros mismos. Realmente, si quisiéramos hacerlo correctamente, deberíamos hacer 100.000 meditaciones sobre los cuatro pensamientos que orientan la mente hacia el Dharma. Estos son el preciado renacimiento humano, la muerte y la impermanencia, los sufrimientos del samsara, y luego el karma, causa y efecto. Sobre esto se encuentran, por supuesto, el refugio y la bodichita, las seis paramitas o actitudes o perfecciones de largo alcance, la renuncia y todas estas cosas. Necesitamos repetirlas una y otra vez, si no es que 100.000 veces o más, para que estén realmente arraigadas.
Dirección segura o refugio
¿De qué sirve hacer 100.000 postraciones y recitaciones de la fórmula del refugio si el refugio no significa nada para nosotros? Bien podríamos estar haciendo 100.000 flexiones. No hay mucha diferencia. Nuestro estado mental es lo más importante. En un nivel profundo, realmente tenemos que entender el refugio. Qué fácil es minimizar la importancia del refugio. El refugio es conocido como la puerta del Dharma, por lo que tiene que significar algo para nosotros. La palabra “refugio” puede parecer pasiva en inglés, pero no es algo pasivo. Es algo muy activo. Significa que estamos dándole una dirección segura a nuestra vida y confiándonos a ella.
Si pensamos en términos de la verdadera Joya del Dharma, ¿qué es? En realidad, son la tercera y cuarta verdades nobles. Es la detención verdadera de todos los oscurecimientos, emociones perturbadoras y demás; es una detención total de estos para que nunca regresen. La Joya del Dharma es un camino verdadero, el verdadero entendimiento que producirá esa detención. Esto es lo que buscamos y tiene que ocurrir en un continuo mental. Los budas son aquellos que la han alcanzado en su totalidad y nos enseñan el camino para lograrlo. La Sangha, la Sangha Arya, son aquellos que la han alcanzado en parte. Nos muestran que es posible proceder de una manera ordenada para alcanzar esa Joya del Dharma nosotros mismos.
De esto es de lo que estamos hablando y lo que estamos imaginando cuando trabajamos en el nivel resultante del tantra. El refugio es absolutamente necesario. Es la dirección a la que nos confiamos y en la que trabajamos en nuestra vida. Este es el significado que tenemos que darle a nuestra vida. Necesitamos trabajar en nosotros mismos y construir algo muy positivo para limpiar y deshacernos de toda esta basura, todas estas cosas negativas que nublan nuestra mente.
Vajrasatva y Yoga del Gurú
¿Qué hacemos con la meditación Vajrasatva si no es sobre la base del refugio? ¿Para qué la hacemos? ¿Qué estamos tratando de lograr? ¿Para qué estamos haciendo una ofrenda del mándala? ¿Qué estamos ofreciendo en términos de eso? Ofrecemos nuestros dos entramados: los entramados de conciencia profunda y fuerza positiva. Esto es lo que ofrecemos: todo lo dedicamos a la iluminación, a los budas y a todos los seres.
¿Qué pasa con el yoga del gurú? Se hace para integrar en nosotros el estado de cuerpo, palabra y mente iluminados que es representado por los gurús. Podemos ver, en términos de la naturaleza búdica del gurú, la misma naturaleza búdica dentro de nosotros. Esto nos inspira, que podemos alcanzar el mismo nivel.
Sin la base fundamental de lo que aprendemos en el sutra, los preliminares no comunes no tienen ningún sentido. No podemos decir que no tengan ningún beneficio; por supuesto, tienen algún beneficio incluso si los hacemos sin pensar con muy poco en nuestra cabeza. Después de todo, existen los relatos estándar de una mosca que circunvala una estupa en un excremento de burro durante el monzón y cómo esa mosca acumula algo de fuerza positiva. Sin embargo, somos seres humanos; tenemos un renacimiento humano precioso, y esto significa que tenemos una mente y un intelecto que son realmente capaces de generar estos entramados. Tenemos la capacidad de comprender. Tenemos la capacidad de escuchar algo para que cause algún tipo de impresión. Podemos leer y tener cierta comprensión de lo que estamos leyendo. Seguramente, podemos hacerlo mejor que una mosca en un excremento.
Es absolutamente esencial, si vamos a involucrarnos en la práctica del tantra, tomarlo en serio. Para ser serios al respecto, necesitamos hacer estos preliminares. Mi maestro, Serkong Rinpoche, solía usar esta imagen de ordeñar el significado de las palabras para sacar todo lo que podamos de ellas. Siempre me preguntaba la connotación de las palabras en inglés que estaba usando para traducir. Me dijo que la palabra “preliminares” no era una palabra tan buena. Dijo que “preparación” era mejor. Una imagen que sería significativa en una connotación tibetana es una caravana. Antes de que podamos emprender un largo viaje, tenemos que prepararnos. Tenemos que conseguir todas las provisiones de lo que necesitamos, equipar bien a todos los animales, pensar realmente en la comida y todas estas cosas. Esto es preparación, y la palabra tiene mucho más sentido que preliminar. Con un preliminar, pensamos que podemos olvidarnos de ese paso. Pensamos: “¿Quién necesita eso?”.
Sin embargo, es una preparación para el viaje. ¿Qué es lo que vamos a necesitar en el viaje de Vajrayana, este vehículo vajra que nos llevará hasta la iluminación? Un vajra, dorje en tibetano, es fuerte; no se puede romper. A veces se traduce como “fuerte como un diamante”.
Podemos preguntarnos, por supuesto, ¿hasta qué nivel necesitamos los preliminares antes de que podamos realmente involucrarnos de una manera significativa en el tantra? Eso está abierto a mucho debate. “Al menos algún nivel” es lo más preciso que podemos encontrar. Cada uno de los preliminares debe significar algo para nosotros y no son solo palabras.
Preciosa vida humana e impermanencia
Estos preliminares deben comenzar a hacer una transformación en nuestras vidas para que realmente apreciemos que tenemos una vida humana preciosa. Necesitamos entender todas las cosas positivas que tenemos a nuestro favor y lo afortunados que somos de no estar en una situación horrible en la que no podríamos trabajar en nosotros mismos. En esto es en lo que nos estamos enfocando: trabajar en nosotros mismos para que no solo podamos ser una persona más feliz sino también para que podamos ser de más ayuda a los demás, porque realmente nos molesta que los demás estén sufriendo y sean infelices. Realmente sentimos que tenemos que hacer algo al respecto; no es que pensemos que somos Dios todopoderoso, pero al menos podemos ayudar lo mejor que podamos. Esto tiene que ser real para nosotros y no solo palabras. Entonces, si nos encontramos con un mendigo o un vagabundo en la calle, sentimos algo y no solo pensamos: “No me molestes”. No es que prefiramos no ver la situación de esta persona.
Este es un renacimiento humano precioso, y no adoptamos la actitud de “Pobre de mí, no tengo salsa de ajo para mi döner kebab”, un ejemplo que usamos en Berlín para lo que se puede llamar “problemas de primer mundo”; “Oh, qué horrible es que se les acabe la salsa de ajo”, como si eso fuera lo peor del mundo. Evidentemente, no es tan terrible. Necesitamos pensar en las cosas positivas y no solo en “pobre de mí”, quejándonos todo el tiempo.
La vida no va a durar. Eso significa que no necesitamos convertirnos en fanáticos, sino que usemos nuestro tiempo en serio y nos demos cuenta de que podría terminar en cualquier momento. No tenemos que pensar solo en términos de muerte. También hay impermanencia en términos de economía, guerra, enfermedades; cualquier cosa puede suceder. Por lo tanto, necesitamos tomarnos realmente en serio lo que va a suceder. Mi amigo más cercano tuvo un ataque al corazón en la ducha y cayó muerto a los 54 años. Parecía perfectamente sano y “bam”, en solo unos momentos estaba muerto. Esto puede suceder en cualquier momento.
Estas comprensiones profundas del ngondro compartido son esenciales para la práctica sincera.
Los preliminares no comunes acumulan fuerza positiva y debilitan los potenciales negativos
¿Qué estamos tratando de hacer con las prácticas preliminares no comunes? Estamos tratando de acumular más fuerza positiva y limpiar, hasta cierto punto, los potenciales negativos. Esto se basa en los factores de la naturaleza búdica, nuestros dos entramados de fuerza positiva y conciencia profunda. Construimos la fuerza positiva con la postración y limpiamos y debilitamos la fuerza negativa con la práctica de Vajrasatva para que podamos hacer la transformación. En lugar de que estos dos entramados den surgimiento a más y más samsara, incluso si es solo en esta vida, dan surgimiento a algo más iluminado en el camino y los niveles resultantes.
Para que se produzca esa transformación de tal forma que estos dos entramados dejen de dar surgimiento a todo este problema y den lugar a algo más positivo, obviamente tenemos que construir esa fuerza positiva y debilitar esa fuerza negativa. Este es el problema con el Dharma-light, porque no queremos construir esa fuerza positiva solo para tener un mejor samsara en esta vida. Eso es lo que sucede y de lo que se trata el karma. Cuando hacemos muchas cosas positivas y no las dedicamos a la iluminación, ¿qué sucede? En el mejor de los casos, mejora nuestro samsara más adelante en esta vida. Por ejemplo, podríamos ser más ricos y tener más amigos, o la gente será honesta con nosotros, etc. Pero, por supuesto, eso podría no madurar en esta vida, solo en alguna vida futura.
Esta mejora es muy agradable, pero sigue siendo problemática si pensamos en las desventajas del samsara, que es uno de los cuatro pensamientos que voltean la mente al Dharma. La felicidad ordinaria no dura; nunca es suficiente. Este es un tipo de problema fundamental que tenemos con el renacimiento incontrolablemente recurrente. Queremos al menos dedicar esa fuerza positiva para que, en lugar de mejorar el samsara, contribuya a la iluminación. Para esto, tenemos que tener algún tipo de nivel de bodichita y dedicación cuando estamos haciendo nuestros preliminares; de lo contrario, simplemente haremos un samsara más agradable, y eso no es lo que anhelamos.
Entonces, tenemos que hacernos una pregunta. Sobre la base del Dharma-light -no creer todavía en el renacimiento, o pensar que tal vez exista tal cosa, pero en realidad no creemos en él-, ¿podemos también anhelar la iluminación? Sí, esto es lo que podemos hacer. Entra en toda la discusión de la iluminación en una vida; sin embargo, existe esa remota posibilidad de que podamos hacerlo en una vida; así que está bien. En ese caso, aún podemos pensar en términos de la perspectiva de esta vida cuando estamos practicando el Dharma como occidentales que aún no creen del todo en el renacimiento. Sin embargo, la dedicatoria a la iluminación sobre la base de la bodichita es esencial si queremos transformar estos entramados, las llamadas colecciones, en entramados constructores de iluminación.
Estamos hablando de lo que construirá la iluminación. Obtenemos esto de la connotación sánscrita de la palabra que se traduce como “colección”. Literalmente, significa algo que construye. Esto me lo señaló Gueshe Wangchen, quien ya falleció, pero fue el tutor de la reencarnación de Ling Rinpoche, el tutor principal de Su Santidad. Señaló esto como el significado real si regresamos al sánscrito y revisamos los comentarios. Dijo que es algo que construye; construye samsara, liberación o iluminación. Todo depende de si dedicamos o no esta fuerza positiva. La palabra sánscrita es sambhara, algo que construye.
Por tanto, los preliminares son muy importantes. El punto más importante de ellos es que debemos practicarlos en el orden correcto. El orden correcto es primero el ngondro compartido. No simplemente nos saltamos el camino del sutra. Tenemos que entender que esto es lo que empacamos como preparación para ir al Vajrayana. De no ser así, es como si no tuviéramos eso en las alforjas de los yaks que llevaremos en este viaje. En otras palabras, es como si no hubiéramos empacado nuestras maletas y las hubiéramos puesto en el maletero de nuestro auto. No podremos registrar nuestras maletas para viajar en avión porque no las empacamos de antemano para nuestro viaje. Si continuamos el viaje, estaremos con las manos vacías. No tendremos nada. Básicamente, necesitamos hacer esta preparación.
Así, esta práctica del sutra como preparación agregará más significado a las postraciones que hacemos, la práctica de Vajrasatva que hacemos, etc. No debemos escatimarnos a nosotros mismos al no empacar suficiente ropa o no llevar suficiente comida para la larga caminata. Al final, lo que pasará es que sufriremos. Es muy fácil en la práctica del tantra emprender algún tipo de viaje extraño a la tierra de la fantasía con todas estas visualizaciones y demás. Es bastante fácil volverse un poco loco y perder el contacto con la realidad. Ciertamente no queremos eso. Eso no va a ser de ninguna ayuda. Tenemos esta actitud de “amo a Milarepa y soy un gran yogui”, y básicamente solo estamos evitando enfrentar la vida huyendo a esta hermosa tierra de la fantasía de la visualización. Eso tampoco es en absoluto lo que queremos hacer.
Por eso tenemos los preliminares comunes, los preliminares compartidos y, solo después de ellos, los preliminares no compartidos. Dejemos que eso se asimile por unos momentos antes de continuar. Si hemos estado haciendo ngondro, estas prácticas preparatorias, o si estamos pensando en hacerlas, intenten examinar qué están haciendo y por qué las están haciendo. ¿Qué esperan lograr? Esto se debe a que será difícil emprender estas prácticas preparatorias. Requieren mucho tiempo, esfuerzo y no será divertido. Si no tenemos claro por qué estamos haciendo prácticas preliminares y qué nos va a sostener mientras las hacemos, vamos a tener un momento difícil. Lo que no queremos hacer es rendirnos a medio camino con una actitud derrotista o pensar en un momento determinado que esto es una estupidez y cuestionarnos por qué lo estamos haciendo.
Es por eso que tenemos esta palabra que generalmente se traduce como “secreto”. Hay secreto en el tantra. No significa que sea un profundo y oscuro secreto que no podamos contarle a nadie, como el secreto de un niño que queremos mantener. La connotación de esa palabra es “privado”. Queremos mantener en privado lo que estamos haciendo. No queremos que otras personas lo sepan, ya que eso puede exponernos a que algunas personas se burlen de nosotros o intenten desanimarnos diciendo que lo que estamos haciendo es realmente extraño o estúpido. No queremos exponernos a eso. No lo necesitamos.
Tenemos que ser muy claros en términos de nuestra motivación, lo que estamos haciendo y por qué lo hacemos. Podemos compartir esto con nuestro maestro, ya que confiamos en nuestro maestro. Hemos revisado las cualidades de nuestro maestro y no solo nos dejamos llevar por un nombre ni pensamos que, dado que todos los demás en el grupo están haciendo preliminares, también nosotros tenemos que hacerlo. Como dijo Serkong Rinpoche, no queremos ser alguien que se precipita sobre el hielo y luego, una vez en medio, se da la vuelta para comprobar si el hielo puede sostenernos. Deberíamos comprobar las cosas primero antes de apresurarnos.
Entramos en este contrato, esta estrecha conexión con las prácticas del tantra. Prometemos que las haremos y las mantendremos en privado. Otras personas realmente no necesitan saberlo. Entonces, se convierte en algo sagrado. Es importante tener esto. Nuestra práctica de tantra y ngondro son cosas que debemos hacer con respeto. Otras personas pueden faltarles el respeto, pero solo lo harán si saben lo que estamos haciendo. No tienen que saberlo, háganlas en privado. Es mucho mejor.
Nuevamente, si estamos involucrados en estas prácticas o estamos considerando involucrarnos en estas prácticas, pensemos en nuestra actitud y en lo que hemos discutido hasta ahora por unos momentos.
[Pausa para contemplar]
Tantra: una continuidad interminable basada en los entramados de fuerza positiva y conciencia profunda
Resumamos lo que hemos cubierto hasta ahora para no perdernos en esta discusión. Tantra significa una continuidad interminable. Tenemos continuidad sobre la base de estos entramados de fuerza positiva y conciencia profunda. La conciencia profunda se refiere a cómo funciona nuestra mente. En el nivel más completo, por supuesto, significa la plena comprensión de las cuatro verdades nobles, con los dieciséis aspectos de las cuatro verdades nobles, la comprensión de la vacuidad de las cuatro verdades nobles, etc.
Sin embargo, en otro nivel, la conciencia profunda solo habla de cómo funciona nuestra mente, con los cinco tipos de conciencia profunda:
- Somos capaces de recibir información.
- Somos capaces de ver patrones y ver cómo encajan las cosas.
- Somos capaces de reconocer la individualidad de las cosas.
- Somos capaces de lograr cosas y saber qué hacer.
- Somos capaces de saber qué son las cosas.
Esta es la forma básica en que trabaja la mente. Tenemos el entramado de conciencia profunda y el entramado de fuerza positiva. En el nivel básico, estos entramados dan surgimiento a más y más experiencias en esta vida y también en vidas futuras. Sin embargo, en el camino, queremos que dejen de dar surgimiento a cosas simplemente samsáricas y que den surgimiento a algo similar al resultado: estas figuras búdicas que podemos usar como un camino que nos genere el resultado.
En el nivel resultante, cuando se convierten en constructores de iluminación, estos entramados pueden dar surgimiento a los Cuerpos de un buda. La naturaleza pura de la mente, etc., permitirá que se produzca esa transformación. ¿Cómo hacemos que se produzca esa transformación? Como en el tantra, tenemos que entretejer todas las diferentes prácticas que hacemos y hacerlas todas juntas a la vez mientras imaginamos que estamos en esta forma de buda. Esta forma de buda es una infografía y todo lo que estamos visualizando es una representación de algún tipo de entendimiento profundo, de comprensión y estado mental que hemos obtenido a través de nuestra práctica del sutra. Esto incluye los cuatro inconmensurables, etc.
Algunas de estas deidades tienen seis brazos y esas son las seis paramitas. Una deidad con cuatro caras representa los cuatro Cuerpos de buda, los cuatro Kayas. Todas estas cosas diferentes representan algo; no es que queramos tener seis o cuatro brazos o sostener todas estas cosas en nuestras manos para siempre. No se trata de esto exactamente. En cambio, lo que estamos practicando y nuestros preparativos tienen que ver con lo que vamos a entretejer y lo que necesitamos para generar esta transformación. Hacemos esto para que nuestros factores básicos de la naturaleza búdica no sigan dando surgimiento a más samsara y más problemas. Darán surgimiento a la liberación y la iluminación. Esta es una descripción general de lo que hemos abordado hasta ahora. Es la base. Estamos practicando algo similar al resultado de lo que pretendemos lograr.