Elaboración en torno a los votos del bodisatva del 1 al 3

Cuando tomamos los votos del bodisatva, estamos prometiendo refrenarnos de dos conjuntos de actos. Aunque en nuestros idiomas occidentales se les refiere habitualmente como los votos raíz y los votos secundarios del bodistava, esos no son los términos reales con los que se les llama en sus idiomas originales. Existen dieciocho acciones que, si son cometidas, actúan como “caída raíz”.  Una “caída raíz” significa una pérdida de los votos del bodisatva, y se le llama “caída” porque nos conduce hacia abajo en nuestro desarrollo espiritual y obstaculiza el crecimiento de nuestras buenas cualidades. Y la palabra “raíz”, se le llama raíz porque es una raíz que debe ser eliminada. Queremos arrancar la raíz que puede provocar nuestra caída. Esa es la razón por la que se le llama así, de acuerdo con los comentarios. En Occidente, para resumir, los llamamos votos raíz del bodisatva, pero en realidad estamos prometiendo evitar estas dieciocho caídas raíz. 

Existen cuarenta y seis tipos de “conductas erróneas” (la traducción literal del término, a los que usualmente se les llama “votos secundarios del bodisatva”. Si transgredimos uno de los votos raíz del bodisatva con todos los factores que se necesitan para perder los votos, perderemos los votos de nuestro continuo mental. En otras palabras, hay ciertas cosas que tienen que estar presentes, cuatro cosas, y si están presentes en nuestra actitud cuando transgredimos uno de estos votos raíz, perdemos todos los votos de nuestro continuo mental; ya no tenemos los votos del bodisatva, excepto en el caso de las dos excepciones. Las excepciones son dos votos en los que ni siquiera se necesita que los cuatro estén completos; si los transgredes, pierdes los votos. En estas acciones erróneas, incluso si los cuatro factores están completos, no pierdes los votos del bodisatva. Esa es la diferencia.

Por cierto, debo mencionar aquí, estábamos diciendo antes que tomamos los votos del bodisatva para todas nuestras vidas, hasta la iluminación. Así que, digamos que los tomé en una vida pasada, y que en esta vida aún no los he tomado. Tengo todos estos factores completos. Si hubiera tomado los votos en esta vida y si estos factores estuvieran completos, hubiera perdido los votos de mi continuo mental. Así que digamos que estos factores están completos antes de tomarlos en esta vida; en tal caso, no se pierden los votos del bodisatva. Pero tomarlos ahora por primera vez en esta vida fortalecerá lo que hemos tomado en vidas previas.

Muy bien. Revisemos cuáles son estas caídas raíz: los llamados “votos raíz del bodistava”. Y aunque podemos encontrar muchos comentarios y explicaciones diferentes de ellos que pueden ser ligeramente diferentes en su énfasis, seguiremos el comentario de Tsongkapa. Por cierto, hay muchas tradiciones de los votos del bodisatva que se derivan de diferentes sutras del Buda, así que lo que los tibetanos siguen de una de las tradiciones indias es de un sutra (lamento que no revisé y no me recordé el nombre del sutra), pero las tradiciones chinas y las tradiciones que se derivan de la tradición china tienen un conjunto diferente de votos del bodisatva que se derivan de otro sutra, así como las tradiciones de los votos monásticos vinaya que se siguen en las tradiciones tibetanas y en las tradiciones chinas son ligeramente diferentes. Y aunque en el Teravada, y probablemente en otras tradiciones Hinayana también, sí afirman que hay bodisatvas y sí afirman que antes de convertirte en un buda eres un bodisatva, es solo que no es un camino que la mayoría de nosotros seguiríamos; y nunca he escuchado una versión Teravada de los votos del bodisatva que tales bodisatvas tomarían. Ciertamente, en el Teravada también tienen historias del Buda en sus vidas pasadas.

Así que, ahora, los dieciocho votos raíz del bodisatva. Estas son las dieciocho acciones negativas que causarían una caída raíz si los transgredimos con todos los factores completos. Con cada uno de estos, necesitamos entender que se estipulan muchas cosas, que son especificadas en términos de lo que realmente significan.


La primera, que es una acción negativa que queremos evitar y de la que prometemos refrenarnos, es alabarnos a nosotros mismos y menospreciar a los demás. Ahora, la persona de la que hablamos tales palabras necesita ser alguien en una posición inferior a la nuestra. Y nuestra motivación es, por un lado, deseo y codicia por recibir ganancia material, alabanzas, amor, respeto y demás de esa persona; por otro lado, celos de la persona que menospreciamos. Y lo que decimos, en términos de alabarnos a nosotros mismos y menospreciar a la otra persona, puede ser verdadero o falso, eso no importa.

Así, básicamente, estamos tratando de obtener algo de esta persona que está en una posición inferior a la nuestra, y estamos tratando de obtenerlo de esa persona, sea respeto, dinero o lo que sea, diciéndole que somos los mejores y que los demás no son buenos. Un ejemplo sería un psicólogo, deseoso de clientes, que se anuncia como: “soy un psicólogo budista solo interesado en ayudar a los demás, y todos esos psicólogos no budistas solo buscan el dinero”. Pero realmente la motivación es ganar más clientes para sí mismo. “Soy el mejor maestro. Son el maestro superior. Los otros no son tan buenos como yo”, y lo único que quiero es tener más estudiantes.

Desafortunadamente, todo nuestro sistema democrático y las elecciones están basados en este principio de alabarse a uno mismo y menospreciar al oponente en la elección, con tal de ganar votos y poder. Esa es la razón por la que todo este aspecto de la democracia y las elecciones es tan difícil de realmente poner en práctica para los tibetanos, porque cualquiera que diga: “yo soy el mejor candidato y el otro no es bueno. ¡Voten por mí!”, es alguien de quien los tibetanos automáticamente desconfiarían, porque está violando, yendo en contra de los votos del bodisatva. La mayoría de los tibetanos serían muy humildes: “Oh, realmente no estoy calificado, realmente no sé cómo hacer esto” y demás. Serían muy humildes y, por supuesto, nadie votaría por ellos. Así que todo este sistema de votar en una democracia en las elecciones es realmente muy difícil de entender para los tibetanos.

Pero si pensamos en términos del camino del bodisatva, es muy importante con estos votos entender cómo – si hacemos lo que decimos que no haremos – eso dañaría nuestra habilidad para ayudar a otros. Tenemos que entender esto. ¿Cómo dañaría esto mi habilidad para ayudar a otros? Así que analizamos, pensamos acerca de ello. Su conociéramos a alguien que dijo: “¡Soy el mejor y todos los demás no son buenos!”, ¿realmente confiaríamos en él? No lo sé.  Quizás muchos occidentales sí. Todo nuestro sistema publicitario está basado en eso, ¿no es así? “Este es el mejor jabón para lavar tu ropa; todos los demás son malos. ¡Compra este!”. Pero si realmente lo analizamos a mayor profundidad, solo quieren ganar nuestro dinero. Así que tenemos que considerar muy bien, ¿vamos a tratar de publicitarnos a nosotros mismos: “soy el mejor bodisatva, soy el mejor para ayudarte. Resolveré tus problemas. Ven conmigo. Nadie es tan bueno como yo”. Incluso aunque sea cierto, eso está indicando una motivación muy materialista. Quiero decir, si está basado en eso – que solo quiero conseguir más estudiantes. Así que tenemos que vigilar esto.

¿Qué hay acerca de decir que el budismo es el mejor y los demás no, que los otros caminos espirituales no son buenos? Si actuamos así, ¿eso rompe este voto? ¿Qué piensan?

Depende de nuestra motivación.

Eso es muy cierto, pero ¿cuál podría ser una motivación adecuada para hacer eso?

Beneficiar a otros.

Bueno, ¿eso sería ingenuo? ¿El camino budista es el mejor para todos ahora mismo? Si vemos lo que Su Santidad el Dalái Lama dice acerca de otras religiones, lo que dice es que todo lo que puede decir – y esto es en respuesta a la teoría de que hay una verdad, una verdadera religión – que lo único que puede decir es que el budismo es lo mejor para él; no puede decir si es lo mejor para ti. Cada tradición habla de su propia meta espiritual. Y el cristianismo no afirma que, si tú sigues el camino cristiano, vas a alcanzar la iluminación budista, sino que dice que alcanzarás la meta cristiana, así que no hay razón alguna para discutir eso. Para ponerlo en lenguaje sencillo, si rezas para irte a un cielo budista, te vas a un cielo budista; si rezas por ir a un cielo cristiano, te vas a un cielo cristiano. No vamos a rezar para ir a un cielo budista y luego vamos a aterrizar en un cielo cristiano, para ponerlo de una forma muy simple. Entonces, diferentes caminos espirituales pueden ser más adecuados para otros en este momento en particular. Así que Su Santidad es siempre muy, muy respetuoso de otras tradiciones espirituales, y lo único que él dice acerca de la tradición budista es que, obviamente, es la mejor para alcanzar la meta budista – de la liberación y la iluminación, la forma en la que se define en el budismo.

(1) Alabarse a sí mismo y menospreciar a otros

Así que esta es la primera. Evitar alabarnos a nosotros mismos y menospreciar a los demás cuando nuestra motivación es el deseo y la codicia, por un lado, y los celos, por otro. Por supuesto, es muy difícil poner esto en práctica si estamos intentando hacer negocios. ¿Cómo publicitamos? Y pienso que si utilizamos publicidad negativa para decir cuán malos son los otros productos, eso ciertamente no concuerda con el voto. Y si nos alabamos a nosotros mismos – qué maravilloso es nuestro producto; es mejor que todo lo demás – eso probablemente tampoco concuerda con el voto. Entonces, ¿cómo publicitamos? Porque cuando estamos haciendo publicidad, ¿cuál es nuestra motivación? ¿Es generar mucha ganancia o es ofrecer nuestro producto a los demás porque será de beneficio para ellos? Uno de ustedes dijo que todo depende de la motivación, eso es muy importante.  

Muchas personas de negocios tienen problemas con estos votos. ¿Cómo hago negocios sobre la base de la ética budista? No es una pregunta fácil – si nuestro único motivo es la ganancia. Porque pienso que un buen ejemplo es el sistema médico estadounidense, que en las recientes décadas todo el sistema de salud estadounidense se ha orientado hacia tener instalaciones de salud con fines de lucro. Los hospitales son propiedad de grupos que tienen acciones en los hospitales, y la idea es darles cada vez más ganancias a los accionistas. Entonces quieren sacarle la mayor cantidad de dinero posible a sus pacientes, y los tendrán la menor cantidad de tiempo posible en el hospital, con el fin de recibir más pacientes – no quieren a alguien que solo ocupe una cama. Toda la orientación parece estar alejada de darle un tratamiento realmente apropiado a los pacientes, y entonces encontramos que la calidad de la medicina a menudo disminuye. Entonces, si nuestra motivación para ayudar a los demás es solo la ganancia, entonces parece que siempre sucede que la calidad de esa ayuda disminuye. Por eso es muy importante que, cuando seguimos el camino del bodisatva, no lo hagamos para obtener algo para nosotros mismos, especialmente si queremos obtenerlo a costa de otros practicantes – ya saben, otros maestros y demás.

(2) No compartir enseñanzas de Dharma o riquezas

El segundo voto del bodisatva, esta acción negativa que prometemos evitar, es no compartir las enseñanzas del Dharma o nuestra riqueza. Y aquí la motivación es el apego y la avaricia. Podríamos ser posesivos con nuestras notas de Dharma, de nuestra computadora, de los archivos de nuestra computadora, no querer compartirlos con los demás y poner todo tipo de excusas para no hacerlo: “Si te presto mi libro vas a derramar café sobre él, así que no te lo quiero prestar”. Ciertamente, podríamos ser posesivos y no compartir dinero con los demás. Como decirle a la gente: “No puedes asistir a este curso de Dharma porque no tienes dinero para pagarlo”. Así que estamos, en cierto sentido, manteniendo las enseñanzas del Dharma para nosotros mismos; no compartimos con los demás la posibilidad financiera de asistir al curso.

También podríamos estar muy apegados a nuestro tiempo y no compartirlo para ayudar a los demás. Por ejemplo, hay algunas personas que son muy apegadas a sus fines de semana: “Este es mi día libre, no me pidan mi ayuda”. Y esto es algo que con frecuencia nos encontramos. Tengo esta página de internet, este proyecto en línea, y algunas veces surgen varias cosas que es necesario hacer en términos de voluntarios y trabajadores en el sitio. Y algunas veces las personas dirán: “Bueno, no me pidan hacer nada el fin de semana: este es mi tiempo sagrado”. Esa no es realmente la conducta del bodisatva, ¿cierto? Si alguien necesita nuestra ayuda – y no estamos hablando de alguien que constantemente abusa del tiempo de otra persona – pero si alguien realmente necesita nuestra ayuda, entonces, sea de día, de noche o fin de semana, ayudamos a la persona. Si nuestro bebé está llorando o se cae de la cama, no decimos: “Bueno, te recogeré en la mañana, lo siento, porque ahora es mi tiempo de dormir”. Si realmente ayudamos a la otra persona, no deberíamos hacerlo al tiempo que nos quejamos. Desde el punto de vista de la conducta del bodisatva, deberíamos sentirnos muy felices cuando otros quieren nuestra ayuda y la solicitan. Esto es lo que estamos practicando ser capaces de hacer, ayudar a todos todo el tiempo como un buda. Si a alguien, de hecho, le gustaría nuestra ayuda, eso es maravilloso. Si a alguien le gustaría aprender algo de nosotros, o compartir nuestras notas de Dharma o lo que sea, entonces nos sentiríamos muy felices de poder compartirlas con ella, si la persona es sincera, por supuesto, y si estas enseñanzas son apropiadas para ella. Algunas veces las personas pueden tener una motivación un poquito extraña en torno a lo que piden.

Una vez, cuando estaba traduciendo para Serkong Rinpoche, mi maestro (esto fue en la era hippie), un hippie muy drogado llegó a ver a Serkong Rinpoche y dijo: “Oh, me gustaría aprender los seis yogas de Naropa. Por favor, enséñame los seis yogas”. Y Rinpoche tomó muy en serio a esta persona y dijo: “Está muy bien que quieras estudiar esto. Es una aspiración maravillosa. Pero para poder estudiarlo, primero tienes que estudiar y aprender esto y aquello, atravesar todo un proceso y trabajar para lograrlo”. Es decir, no estaba siendo tacaño con el Dharma, en términos de no enseñarle a esta persona los seis yogas de Naropa. Era obvio que el chico no estaba listo para eso, pero lo condujo de una forma en la que, con el tiempo, lo conduciría a esa enseñanza de Dharma, la cual fue la forma apropiada de lidiar con él.

Recuerden el principio general al que me referí antes: un bodisatva de un nivel inferior de logro no trata de hacer las prácticas de un bodisatva con un nivel de desarrollo superior cuando no es capaz de hacerlo. Así que, si alguien nos pide nuestra ayuda y simplemente no somos capaces de hacerlo, no tenemos que fingir que podemos hacer más de lo que podemos hacer. Tenemos que decir: “Desearía poder hacerlo, pero realmente no estoy calificado”. Si le decimos eso a un tibetano, el tibetano sentirá que solo estamos siendo humildes, que en verdad estás calificado y que solo estás diciendo: “Oh, no, no, no, no estoy calificado, no puedo hacerlo”, y entonces insistirá. Pero entonces realmente tenemos que insistir: “No, no solo estoy siendo humilde, realmente no estoy calificado para hacer esto”.  

Permítanme darles un ejemplo. En un instituto de Dharma en Italia, el Instituto Lama Tzong Khapa, tienen lo que se conoce como el Programa de Maestría para estudiar los temas principales del entrenamiento monástico. Es para personas laicas y para monásticos. Es un programa de seis años. Y tienen un Gueshe que enseñó el primer tema de este curso; pero entonces, cuando llegó el momento de empezar el segundo tema, que era Madyámaka, dijo: “No estoy calificado para enseñar esto”. Y, por supuesto, todos insistieron que lo hiciera de cualquier manera, que solo estaba siendo modesto, pero dijo: “No, realmente no estoy calificado”. Y entonces lo cotejaron con otros compañeros de clase de él y de sus maestros y, en verdad, realmente no estaba calificado; ese no era su tema fuerte, aunque era un Gueshe. Pero ofreció quedarse y ayudar a un Gueshe calificado. Así que el instituto encontró a otro Gueshe que accedió a enseñar, y el primero que dijo “no estoy calificado” se quedará a ayudar. Así que este primer Gueshe no está transgrediendo su voto del bodisatva al no compartir enseñanzas de Dharma; de hecho, estaba siguiendo este entrenamiento desde el estado comprometido de la bodichita de aspiración, al no pretender tener cualidades que no tiene.  

Entonces, si alguien nos pide que expliquemos una enseñanza de Dharma o que compartamos nuestras notas, podemos decir: “Muy bien, puedes ver mis notas, pero no son muy buenas”, o “no son claras” o “mi entendimiento no es muy bueno”. Sean honestos al respecto. Y si no las entendemos, decimos “no lo entiendo, no puedo explicarte”. En todo este asunto de no compartir nuestro tiempo y demás, tenemos que usar nuestro darse cuenta que discrimina. Parte del entrenamiento del bodisatva es saber cuándo necesitamos tomar un descanso, de tal forma que tengamos la fortaleza para seguir ayudando a los demás. En tales casos, decimos: “Me gustaría ayudarte, pero estoy realmente exhausto. Necesito tomar un descanso. Simplemente en verdad no puedo”.

Lo que también es difícil es cuando muchas personas nos piden ayuda al mismo tiempo, y no podemos multiplicarnos a nosotros mismos en mil formas diferentes para ayudarlos a todos simultáneamente. No somos budas todavía. No podemos ayudar a todos al mismo tiempo. En tales casos, desafortunadamente, tenemos que escoger. ¿Cómo escogemos, cómo priorizamos? Bueno, Su Santidad el Dalái Lama dio algunos lineamientos para esto. “Vean qué es” dijo, “aquello en lo que están más calificados y que no haya muchos otros que hagan lo mismo, y pongan su principal énfasis en eso. Y para las cosas que otras personas puedan hacerlas tan bien como tú, recomiéndalas. Enfócate en aquello en lo que solo tú eres más capaz de hacer”. Tomaré mi propio ejemplo. Si alguien acude a mí y me dice: “Me gustaría aprender tibetano, por favor, enséñame tibetano”. Bueno, hay muchas otras personas que enseñan tibetano y hay muchas otras cosas que yo puedo enseñar que otras personas no pueden enseñar. En ese tipo de situación, digo: “Bueno, están estas otras personas…” y recomiendo a algún otro maestro para que estudien tibetano, especialmente los niveles principiantes de tibetano.

Otro principio, en términos de cómo priorizar, sería si tenemos una conexión sumamente especial con esta otra persona y ella es extremadamente receptiva con nosotros. Les daré un buen ejemplo. Su Santidad el Dalái Lama tenía tutores. Y entonces tenemos al renacimiento del tutor sénior, Ling Rinpoche, y el renacimiento del llamado tutor asistente, mi propio maestro, Serkong Rinpoche. Este título de Serkong Rinpoche no era realmente “tutor asistente”, era el “compañero de debate maestro”, pero no necesitamos entrar en todos esos detalles. Era un maestro de Su Santidad. Habían nacido con un año de diferencia entre sí, por lo que eran muy cercanos en edad. Cuando eran niños, me parece que tenían tres o cuatro años de edad, Su Santidad les dio su primera lección de lectura del alfabeto tibetano. Ahora, obviamente, Su Santidad no continuó siendo su maestro de alfabeto ni les enseñó a leer. Pero en términos de esta estrecha relación muy especial que tuvo con sus maestros, cuando su renacimiento fue encontrado, él fue quien les dio su primera lección.

Mi propio amigo, Alan Turner, tenía una conexión muy estrecha con Serkong Rinpoche. Alan en realidad nunca aprendió tibetano, pero Serkong Rinpoche le dio una primera lección para sembrar las semillas del idioma tibetano. Por supuesto, no hacía eso con otras personas. Su Santidad no había dado lecciones de idioma tibetano a otras personas más a que su propio maestro con quien tuvo una relación tan cercana. Priorizamos de esta manera. ¿Cuál es la necesidad especial? ¿Cuánto – si le enseño a esta persona – cuánto beneficio podrán darle a los demás? En términos de cómo invertir nuestro tiempo, ¿tenemos realmente una conexión estrecha? ¿Esa persona es realmente receptiva a mí? O, más en general, ¿para qué estoy más calificado y no hay muchas otras personas haciéndolo? Y en términos de otras solicitudes de nuestro tiempo, podríamos intentar hacer un poco y dar sugerencias. No solo nos enojamos y decimos, ya saben: “Déjame en paz. Lárgate”. Eso va en contra de la conducta del bodisatva.

Y lo que es muy interesante, le hice esta pregunta a Ringu Tulku – él es un gran maestro Kagyu – y dijo otro factor a considerar, tomando en cuenta el hecho de que aún somos seres samsáricos, no somos budas, en términos de cómo priorizamos nuestro tiempo: es lo que disfrutamos hacer. Este tipo de motivación un poco egoísta en realidad está bien porque nos ayuda a tener mayor fortaleza y entusiasmo. Y eso está bien siempre y cuando no sea nuestra consideración principal.
Así que hay un grupo de factores que podemos tomar en consideración en términos de cómo pasamos nuestro tiempo ayudando a otros, haciendo cosas para beneficiar a otros.

Luego tenemos que considerar: ¿Puedo mantener esto, soy capaz de hacer esto? Si vamos a tomar los votos del bodisatva, ¿seré capaz de hacerlo? Consideremos, ¿puedo mantenerlo o no? Muy bien, así que queremos evitar alabarnos a nosotros mismos y menospreciar a los demás debido al apego y a la codicia por la ganancia y los celos hacia los demás. Y tenemos que evitar no compartir las enseñanzas del Dharma, o nuestra riqueza, posesiones, tiempo o lo que sea, debido al apego y la mezquindad.

Si no compartimos enseñanzas del Dharma por otras motivaciones, como flojera o enojo, “no me agradas, así que no voy a ayudarte ni a compartir nada contigo”, ese es uno de los votos secundarios del bodisatva, evitar eso. No es un voto raíz. Así que la pregunta es ¿por qué? ¿Por qué uno es un voto raíz y otro un voto secundario? Bueno, porque como bodisatvas necesitamos estar dispuestos a darle a todos, no solo quedarnos las cosas para nosotros mismos. Cuando tenemos apego y somos mezquinos, lo cual significa que no queremos compartir, eso realmente va en contra de todo el anhelo del bodisatva. Que solamente soy muy flojo, bueno, ese es un marco mental completamente diferente, ¿no es cierto? “Me gustaría ayudarte, pero soy muy flojo para hacerlo”.

(3) No escuchar las disculpas de otros o golpearlos

El tercer voto del bodistava, lo que queremos evitar, es no escuchar las disculpas de los demás, o pegar, golpear a otros. Hay dos cosas implicadas aquí. La primera, no escuchar las disculpas de los demás o golpear a otros; la motivación para ambas es principalmente el enojo. La primera se refiere a las situaciones reales en las que le estamos gritando a alguien o lo estamos golpeando, por ejemplo, a nuestro niño malcriado y, ya sea que esa persona u otra suplique por perdón, como nuestra esposa, nos suplique que nos detengamos y nos rehusamos a hacerlo. Y la siguiente es simplemente pegarle o golpear a alguien. Es un voto secundario del bodisatva rehusarnos a escuchar las disculpas de los demás después de la situación, cuando guardamos rencores. Así que hay dos situaciones aquí. Alguien suplica perdón, ya saben, “por favor, deja de gritarme”, cuando estamos en el momento gritando o golpeando a alguien o siendo muy malos con esa persona debido al enojo. Obviamente, en ese momento somos un bodistava, incluso si nos enojamos. La otra persona dice: “Por favor, detente. Lo siento”. Obviamente necesitaríamos detenernos, perdonar a la persona y aceptar su disculpa. Aunque perdonar es un concepto muy extraño, ¿no es cierto? Pienso que no hay una palabra que se acerque mucho, de hecho, no puedo ni siquiera pensar en una palabra en tibetano para “perdonar”. Básicamente, dejar de estar enojados y dejar de golpear a la otra persona. El “perdón” actúa como si estuviera en nuestro poder alejar a la otra persona de las consecuencias kármicas; eso no es budista. Así que es simplemente un asunto de dejar de estar enojado con la persona, dejar de gritarle a la persona, dejar de golpear o de rechazar a la persona – en el caso en el que realmente estemos gritando, etc.

El voto secundario es en términos de lo que hacemos después. Aún estamos enojados con la otra persona o guardamos resentimiento; y luego, más tarde, la otra persona nos dice “lo siento”. En ese momento, se refiere a no aceptar la disculpa ni soltar el resentimiento y el enojo. Pienso que la diferencia aquí es entre tener un fuerte enojo, el cual nos motiva a realmente cometer una acción destructiva, como gritarle a la persona o golpearla, o hacer algo negativo hacia ella, y la otra situación es guardar resentimiento – guardar el enojo adentro, pero no actuarlo.

Obviamente, si queremos ayudar a los demás, aun si temporalmente nos enojamos, necesitamos soltarlo, soltar ese enojo o rencor. Y el otro aspecto de este voto es evitar golpear a los demás, y esto se refiere a golpearlos con enojo. Puede haber situaciones en las que sea necesario quizás golpear a alguien, o que pueda ser benéfico, pero no con enojo. Podríamos, por supuesto, usar un ejemplo indio: para que tu búfalo de agua camine y vaya hacia algún lado, quizás tengas que darle una palmada en la espalda. Si solo le dices a tu búfalo de agua: “por favor, ve para allá”, probablemente no entenderá. Así que eso no es golpear al búfalo de agua con enojo. Un búfalo de agua es un tipo de animal que se encuentra en toda la India y Nepal. Es muy, muy grande, mucho más grande que una vaca. Es negro, tiene cuernos y da una leche muy rica. Así que quizás ustedes no tienen un búfalo de agua, ni siquiera saben qué es un búfalo de agua, y la mayoría de nosotros no tenemos búfalos de agua, ni siquiera un caballo o un camello al que tengamos que pegarle para que avance. Pero algunas veces, incluso con un niño muy malcriado; si el niño está a punto de correr a la calle transitada y existe el peligro de que lo atropellen o lo maten, algunas veces tendremos que usar medios violentos para agarrar al niño, o empujarlo para que no vaya hacia la carretera. Esto no se hace por enojo. Así, de nuevo, el efecto de diversas acciones es muy afectado por la motivación, y aquí la motivación es el enojo o la mala voluntad. Queremos lastimar a la otra persona. Y si en tal momento la persona dice: “Por favor, no hagas eso. Por favor, detente” y nos rehusamos, entonces eso transgrede este voto. Así que ese es el tercer voto del bodisatva.

Top