La conexión entre la repercusión kármica y los resultados kármicos
¿Qué conecta los diferentes tipos de repercusión kármica y resultados kármicos?
Este es un asunto que se debate mucho y cada uno de los sistemas de principios budistas indios tiene una explicación diferente. Todos los sistemas de principios afirman que la repercusión kármica que es potencial kármico, el entramado de potencial positivo, las tendencias kármicas, los hábitos kármicos constantes – aunque solo los sistemas de principios Mahayana afirman los hábitos kármicos constantes – son fenómenos de imputación sobre una base. Concuerdan en que el continuo de esa base es lo que mantiene la continuidad de la repercusión kármica hasta que deja de dar surgimiento a sus resultados kármicos, incluso en vidas futuras. Sin embargo, difieren con respecto a lo que funciona como esa base. El Vaibáshika afirma que son los cinco agregados. El Sautrántika y el Svatántrika afirman que es la conciencia mental. El Chitamatra afirma que es la conciencia base, el alayavijnana.
El Prasánguika afirma que es el “yo” convencional, el cual es, en sí mismo, un fenómeno de imputación sobre los cinco agregados en cada momento, incluso durante la existencia de muerte. Esto pasa por alto el asunto de qué tipo de conciencia sirve como esta base, dado que aquellos sistemas de principios que afirman algún tipo de conciencia como la base afirman que esa conciencia también es la base que contiene la marca característica definitoria del yo. El Prasánguika refuta que el yo tenga alguna marca característica definitoria encontrable.
Solamente el Vaibáshika y el Madyámaka afirman las formas no reveladoras, y solo el Madyámaka afirma que algunas de ellas, como los votos del bodisatva, continúan en las vidas futuras. Durante esta vida, los votos del bodisatva continúan con el continuo de una conciencia mental como parte del agregado de las formas. Pero, ¿qué pasa durante la existencia de muerte?
Como he mencionado antes, en el plano de los seres sin forma, el llamado “reino sin forma”, aún hay formas extremadamente sutiles, solo no hay las formas burdas del plano de los objetos deseables (reino del deseo) ni las formas sutiles del plano de las formas etéreas (el reino de la forma). Las formas no reveladoras son un tipo de estas formas más sutiles, dado que no están hechas de elementos burdos o sutiles, y están presentes durante la existencia de muerte. Por lo tanto, hay continuidad de los votos del bodisatva al siguiente renacimiento.
Análisis de las formas no reveladoras y el tantra anutarayoga
¿Cómo encajan estas formas no reveladoras en el tantra anutarayoga?
Entre las formas de fenómenos físicos, hay diversos tipos de formas que solo pueden ser conocidas por conciencia mental, tales como los objetos del sueño. Algunos de estos objetos, por ejemplo, las partículas (el equivalente budista de los átomos), están hechas de elementos sutiles, y algunas no están hechas de elementos. En todos los casos de tantra, nos visualizamos a nosotros mismos en la forma de una figura búdica tal como Chenrezig, Tara, Kalachakra o Yamantaka; hay cientos de ellas. Cuando hacemos esto con cognición mental conceptual, estas figuras están hechas de viento de energía sutil, el cual es la base de la conciencia conceptual. En el tantra anutarayoga, en los niveles avanzados de la etapa completa, somos capaces de generar estas figuras búdicas del viento de energía sustentador de la vida más sutil, el cual es el soporte o la base de la mente de luz clara.
Las formas no reveladoras no están hechas de elementos, ya sea burdos o sutiles. Sin embargo, en términos del tantra anutarayoga, están hechas del viento de energía sustentador de la vida más sutil. No son como las formas desprovistas que se discuten en el Kalachakra, las cuales son imágenes que surgen en el espejo mágico de la mente de luz clara. Esto es porque las formas desprovistas también surgen naturalmente en el nivel base, mientras que las formas no reveladoras son algo que solamente surge simultáneamente con las formas reveladoras cuando las formas reveladoras son generadas con una fuerte motivación.
La diferente fuerza y maduración de la repercusión kármica y los resultados
Esta pregunta tiene tres partes. La primera parte es si los animales producen nuevo karma, especialmente los animales carnívoros que matan todas sus vidas. Claramente si todas estas acciones crearan nuevo karma sería bastante terrible, ¿o es esto solo un agotamiento del karma de vidas anteriores? La segunda parte se refiere a los niños pequeños y a los bebés que no se pueden controlar a sí mismos y tienen emociones fuertes como el enojo; si no pueden controlarse a sí mismos porque son bebés, ¿significa que acumulan el mismo karma con la misma intensidad que los adultos? La tercera parte de la pregunta es básicamente la misma, pero tiene que ver con personas con trastornos psiquiátricos que no se pueden controlar a sí mismas; ¿sus acciones tienen el mismo peso kármico y resultados que las personas sin esos problemas?
Hay muchos factores que afectan la fuerza de los potenciales kármicos y la intensidad de los resultados que maduran de ellos. Por ejemplo, mientras más repetimos una acción sin aplicar fuerzas oponentes, más fuertes serán los resultados kármicos. Si uno aplica fuerzas oponentes como el arrepentimiento y promete no repetir la acción, entonces el potencial se debilita.
De hecho, hay una lista de 13 variables diferentes que afectan la fuerza de la maduración de los potenciales kármicos. Incluyen, por ejemplo, cuán a menudo repetimos la acción y la frecuencia con la que la repetimos. Sin embargo, uno de los factores más relevantes con relación a tu pregunta es la fuerza de las emociones perturbadoras o la emoción positiva que produce y acompaña a una acción.
Recuerden que de lo que estamos hablando es de lo que madura de la repercusión kármica. Esto incluye que nos guste repetir cierta acción, lo cual significa ser instintivamente atraídos a repetir cierta acción. Si nacemos como un animal carnívoro, matamos por instinto. Un león no piensa y decide si debe matar a su presa, solo matará cuando tiene hambre, mientras que un gato torturará a un ratón, aunque no tenga hambre. De nuevo, el hardware del tipo de cuerpo y cerebro y los instintos que van con ellos afectarán lo que el animal hace.
Sin embargo, cuando un león caza, mata y se come un antílope, podríamos preguntarnos realmente cuánto enojo tiene el león hacia el antílope. Al realmente matarlo, tiene que haber cierto tipo de agresión; sin embargo, la motivación causal no sería el enojo, sería el hambre. Aun así, es una acción destructiva porque hay ignorancia e ingenuidad acerca de la causa y el efecto kármico. Un león que mata a su presa es parte del samsara y perpetuará el samsara de ese ser nacido como un león. Sin embargo, el resultado kármico de un león matando a un antílope es más débil que el de un humano que asesina por enojo y tiene el darse cuenta que discrimina para saber que no debe hacerlo.
De las emociones perturbadoras, el enojo es la más fuerte, luego el apego y el deseo, y la menos fuerte es la ingenuidad o ignorancia. Una de estas tres actitudes venenosas generalmente está ahí. Un bebé o niño pequeño, cuando dice: “te odio” y le pega a su mamá o a su papá, tiene cierto enojo, pero no está profundamente arraigado como lo estaría en un adulto. Lo que es muy fuerte ahí es que el bebé no conoce algo mejor. No conoce la diferente entre, como diríamos en Occidente, lo correcto y lo incorrecto. Hay una falta de entendimiento, por lo que las acciones de los niños son menos pesadas que las de un adulto con un fuerte enojo y la habilidad de discriminar y ejercer autocontrol. Aunque el pequeño es demasiado joven para ejercer autocontrol, aun así, cuando le pega a otro niño por enojo, es algo destructivo.
Otro factor que está involucrado es la cantidad de sufrimiento que se causa a la otra persona. Cuando una madre dice que es tiempo de ir a la cama a un niño de dos años, y el niño de dos años dice: “no quiero ir a la cama, te odio”, la madre realmente no se siente herida ni siente que el niño en verdad la odie. Es diferente a un adulto o a una pareja que dice “te odio”.
En el caso de un criminal sicótico, incluso nuestro sistema legal diferencia a tal persona de un criminal en su sano juicio y lo castiga de forma menos severa. En cualquier caso, un renacimiento animal es bastante terrible. Esto es porque, si nacemos como un animal carnívoro, seguiremos construyendo un potencial negativo cada vez más fuerte por seguir matando. Esta tendencia y potencial kármico de ser atraído instintivamente a matar es muy difícil que se agote en un animal porque el animal sigue matando, y esto refuerza el poder de ese potencial y tendencia.
Bodichita facsímil y bodichita no elaborada
Mi pregunta es acerca de los dos tipos de potencial positivo. Uno se construye con bodichita elaborada, la cual es solo un facsímil y no la bodichita real. Pero cuando tenemos bodichita sin esfuerzo, se vuelve potencial constructor de iluminación. ¿El primer tipo de alguna manera nos genera el segundo?
La bodichita facsímil nos ayuda a construir potencial positivo y, dado que la estamos dedicando a la iluminación, contribuirá a ser capaces de desarrollar la bodichita no elaborada. Entonces, sí, la bodichita elaborada nos ayuda a construir la bodichita no elaborada.
Quiero aclarar algo que es un malentendido que la gente puede tener con respecto a lo que necesitamos para alcanzar la primera de las cinco mentes que son el camino, la mente que es el camino de la construcción – lo que generalmente se llama “camino de acumulación”. Un camino de la mente es un estado mental que tiene un cierto nivel de desarrollo con el que ahora puede operar. Para alcanzar una mente que es el camino de la construcción como bodisatva, necesitamos alcanzar esta bodichita no elaborada. Necesitamos ser capaces de desarrollar o generar la bodichita sin tener que apoyarnos en una línea de razonamiento – la de la causa y efecto en siete partes o la de igualar e intercambiar al yo con los demás. La hemos recorrido suficientes veces, hemos construido suficiente potencial positivo y lo hemos dedicado a la iluminación de tal forma que la bodichita surge automáticamente.
Todas las alabanzas de la bodichita que encontramos, como en el primer capítulo de Involucrarse en el comportamiento del bodisatva, Bodhicharyavatara, de Shantideva, se refieren a la bodichita no elaborada. Tan pronto como desarrollamos eso, es fantástico. No quiere decir que no sea bueno desarrollar el facsímil, tenemos que tener eso primero. Pero los beneficios realmente provienen de la no elaborada.
Además, también necesitamos una cierta construcción de conciencia profunda de la vacuidad para alcanzar la bodichita no elaborada. En el budismo siempre hablamos de método y sabiduría. Por lo tanto, también necesitamos un darse cuenta que discrimina de la vacuidad. Sin embargo, será conceptual antes y en la etapa de la mente que es el camino de la construcción porque eso es lo único que podemos tener en este punto.
¿Cuál es el tema que necesitamos entender con cada una de las mentes que son el camino? Tanto para el Hinayana como para el Mahayana, son las cuatro verdades nobles y los dieciséis aspectos de las cuatro verdades nobles y, además de eso, la vacuidad de la persona que experimenta las cuatro verdades nobles. En el Mahayana, esto también incluye el entendimiento de la vacuidad de las cuatro verdades nobles en sí mismas y la vacuidad de la mente que las experimenta.
Esto es muy importante. Tanto en el Hinayana como en el Mahayana, necesitamos entender la vacuidad de la persona que está experimentando sufrimiento; la persona que tiene ignorancia y enojo y demás; la persona que tendrá la detención verdadera de estos alborotadores; y la persona que tendrá el entendimiento que producirá eso. Tenemos que entender la vacuidad del “yo” haciendo y experimentando todo esto.
En términos de Quién tiene la culpa del karma, nuestro tema, es el “yo” que experimenta los resultados del karma – la primera verdad noble – el “yo” que experimenta sufrimiento. El “yo” que experimenta las causas de las acciones kármicas, ese es el “yo” que experimenta la segunda verdad noble, las causas del sufrimiento. Este es el contexto más amplio en el que embona lo que estamos discutiendo.
No es necesario haber alcanzado shámata para alcanzar una mente que es el camino de construcción, en absoluto. Lo único que necesitamos es la bodichita no elaborada. Es posible que hayamos alcanzado shámata de antemano enfocados en la respiración o lo que sea, pero no tenemos que tener eso. Lo que estamos construyendo con esa mente que es el camino de la construcción es shámata enfocado en la vacuidad de la persona que experimenta las cuatro verdades nobles y, al ser Mahayana, también enfocado en la vacuidad de las cuatro verdades nobles mismas y en la vacuidad de la mente que las experimenta. Y, como dije, nuestro enfoque en la vacuidad en esta etapa será conceptual.
Necesitamos establecer bien nuestras prioridades en términos de lo que realmente necesitamos. Necesitamos la bodichita no elaborada y un entendimiento conceptual de las cuatro verdades nobles y las vacuidades que están involucradas. Esto no tiene que ser con shámata, concentración perfecta, para obtener esa mente que es el camino de la construcción. Trabajamos en eso después.
Su Santidad el Dalái Lama dice que la mayoría de la meditación que él hace diariamente es meditación analítica. Podríamos empezar a preguntarnos por qué alguien en ese nivel tiene que hacer meditación analítica todos los días. Mi teoría es que tenemos una gran reserva de escucha de las enseñanzas, y lo que estamos constantemente tratando de hacer es unir cada vez más piezas de más maneras. Ese es un aspecto del proceso continuo de la meditación analítica y luego está el familiarizarse con ello repetidamente.
Cualquiera que sea el nivel de concentración que tenemos, lo usamos en la meditación analítica. Por supuesto, necesitamos un nivel mínimo de buena concentración. Lo que afecta nuestra habilidad para concentrarnos es principalmente el interés. Si realmente estamos interesados en algo, podemos concentrarnos. Vean a un niño con trastorno por déficit de atención y, por ejemplo, lo bien que puede concentrarse en un videojuego. Esto es porque está interesado en él.
Si realmente estamos interesados en el Dharma porque vemos los beneficios, podremos concentrarnos, al menos hasta cierto nivel, para obtener algún tipo de comprensión profunda. La concentración no tiene que ser perfecta para obtener comprensión profunda y para hacer cambios graduales en nuestra conducta y entendimiento. Obtener concentración perfecta es maravilloso. No tiene nada de malo o erróneo, sin embargo, lo que realmente genera cambios es nuestro entendimiento y nuestra motivación de la bodichita.
¿Qué tipo de acciones tenemos que evitar si no queremos perder nuestro camino del Dharma y queremos mantener nuestro interés en el estudio y la práctica? ¿Qué necesitamos evitar?
Pongámoslo de la forma contraria. ¿Qué necesitamos desarrollar? Necesitamos desarrollar decisión de que las enseñanzas son correctas, de que son de beneficio, y de que seremos capaces de realmente entenderlas y aplicarlas. Queremos evitar pensar que las enseñanzas son tontas o incorrectas, que no son de beneficio en absoluto o que, aunque sean de beneficio, no podremos jamás entenderlas ni alcanzar nada.
El potencial kármico positivo no dedicado produce felicidad mundana
¿Pueden los resultados de nuestra práctica satisfacer deseos samsáricos comunes?
Sí, el potencial kármico positivo que no se dedica a la liberación y a la iluminación madurará como felicidad mundana y que las cosas vayan bien desde un punto de vista mundano. Esto ciertamente es preferible. La felicidad es un estado mental que es mucho más conducente para ser capaces de avanzar en el camino que el hecho de ser miserable e infeliz.
Necesitamos tener una cierta cantidad de sufrimiento y no demasiada felicidad, pero el preciado renacimiento humano es mucho mejor para practicar el Dharma que el renacimiento como mosca. En el lam-rim, las etapas graduales del camino, ¿qué hace alguien con un nivel inicial de motivación? Tratan de evitar actuar destructivamente y construir potenciales negativos y, por el contrario, tratan de construir potenciales positivos para seguir teniendo preciados renacimientos humanos para poder avanzar en el camino. Ese es el nivel inicial y lo necesitamos. Esto no es algo que dejamos de hacer como una base porque vamos a necesitar ese preciado renacimiento humano hasta la liberación y la iluminación.
Podemos dividir cada una de las etapas de la motivación del lam-rim en tres etapas. Podemos querer obtener un preciado renacimiento humano para disfrutar de los placeres del samsara. Podemos querer un preciado renacimiento humano para tener una base para alcanzar la liberación. O podemos desear un preciado renacimiento humano para obtener una base para alcanzar la iluminación. De esa forma, el nivel inicial de motivación se puede dividir en estos tres.
El potencial kármico que no madura en esta vida
Si estamos en una situación en esta vida en la que, aunque intentemos, no podemos concebir un hijo, ¿eso significa que no tenemos el potencial kármico para tener un hijo?
Decir que no tenemos el potencial kármico para ser capaces de concebir un hijo en esta vida, no significa que no tengamos el potencial kármico de tener un hijo en alguna vida futura. No hay final del renacimiento hasta la iluminación. Sin embargo, para ser más precisos, necesitamos el potencial kármico para nacer con un cuerpo que es capaz de concebir un hijo. El hecho de que tengamos un hijo con ese cuerpo es afectado por muchos otros factores.
Una vez que un potencial kármico ha madurado en la forma de tomar un cuerpo de renacimiento y, digamos que hemos nacido ciegos, no hay nada que podamos hacer para no ser ciegos en ese cuerpo; ya ha madurado. Si nuestro cuerpo de renacimiento es infértil, no hay nada que podamos hacer para cambiar eso. Por supuesto, hay casos en los que pensamos que somos infértiles, pero el tratamiento médico puede ayudarnos a concebir. Podemos tener el potencial kármico para eso. Pero también puede ser el caso que tales tratamientos no funcionarán porque simplemente no tenemos el potencial de volvernos fértiles en esta vida. Si un potencial kármico no ha madurado aún, entonces podemos aplicar otras diversas fuerzas para crear las circunstancias en las que podría madurar. Sin embargo, si ya ha madurado, se ha terminado.