Introducción
Hoy vamos a discutir un tema muy importante: ¿Cómo desarrollamos la bodichita por primera vez? ¿Es libre albedrío, determinismo u otra cosa? Verán, si nuestra motivación es ayudar a todos los seres y para hacer eso necesitamos liberarnos y alcanzar la iluminación, la pregunta es: ¿Cómo sucede eso? ¿Es una cuestión solo de libre albedrío? ¿Podemos simplemente elegir hacer eso? ¿Ya está determinado, sea que el Buda lo ha profetizado o de alguna manera proviene del karma o de alguna otra explicación mecanicista?
Escribí una conferencia completa sobre esto y también impartí dos seminarios sobre la cuestión del libre albedrío versus el determinismo. Lo que me gustaría hacer en las sesiones de hoy es presentarles la meditación analítica sobre eso.
Lo que he escrito es bastante largo, y no creo que sea de mucha ayuda simplemente leérselos; lo que propondría hacer es solo revisarlo lentamente, porque el punto importante, me parece, es obtener cierto entrenamiento en torno a cómo analizamos problemas tan difíciles, porque no podemos simplemente buscarlo en algún libro (en realidad no se discuten este tipo de temas en los tratados tradicionales del budismo tibetano). Así que llegaremos tan lejos como podamos, y luego, con suerte, habrán adquirido un poco de herramientas para que puedan seguir adelante si lo desean. Después de todo, el objetivo de venir aquí es aprender. Y para seguir el camino budista, la forma en que uno aprende es que se le dan las herramientas y luego uno mismo aprende a usarlas, porque el camino del desarrollo espiritual es de autodesarrollo. Aprendemos a analizarnos y a trabajar nosotros mismos para alcanzar la iluminación. De esa manera, a través de nuestro esfuerzo e inspiración (guía de nuestros maestros), podemos desarrollarnos hasta la iluminación.
Ahora, para analizar necesitamos una gran cantidad de herramientas, y esto significa que debemos tener al alcance de la mano una gran cantidad de información básica de las enseñanzas budistas, por eso el estudio es tan importante. Por ejemplo, podemos estudiar el lam-rim (las etapas graduales del camino), pero ese no es un proceso de una sola vez. Aprendemos cosas, y luego tomamos todo del lam-rim y volvemos al principio y tratamos de acomodar todo lo que viene después en cada uno de los puntos conforme lo revisamos de nuevo, y luego acomodamos todos los estudios del Madyámaka y todas las otras cosas que hemos estudiado.
La forma en que estudiamos el Dharma es como recibir piezas de un rompecabezas. Así que tenemos todas estas pequeñas piezas, y lo que tenemos que aprender a hacer es ponerlas juntas, y van juntas de muchas formas diferentes, no solo de una. Es por eso que a menudo uso el término entramado, porque todas estas cosas se interconectan y se refuerzan entre sí de muchas maneras multidimensionales. Cuantas más cosas podamos factorizar en este entramado, más profunda será nuestra comprensión y percepción, hasta que finalmente desarrollemos la mente omnisciente de un buda, en la que todo, todo el conocimiento y la comprensión, se interconectan en la conciencia omnisciente de un buda. Entonces es una aventura. Si uno lo ve como una aventura más que como una tarea difícil, podemos desarrollar una perseverancia gozosa, disfrutamos trabajando con esto. Así que comencemos nuestra aventura hoy.
Ni libre albedrío ni determinismo
El samsara se refiere al renacimiento incontrolablemente recurrente, y no tiene principio, sin embargo, puede haber una primera vez cuando desarrollamos un anhelo de la bodichita. Esas son dos cosas que son bastante difíciles de unir: no hay principio del continuo mental y, sin embargo, hay un principio en el que desarrollamos la bodichita por primera vez. Por supuesto, de la traducción lo que surge es que se usa la expresión tiempo sin principio. El tiempo se convierte entonces en un tema muy difícil, así que no quiero entrar en demasiados detalles al respecto (tengo mucho material en mi sitio web sobre el concepto budista del tiempo), pero es muy diferente de nuestras ideas occidentales convencionales de tiempo, porque no estamos hablando del tiempo como contenedor, que las cosas pasan dentro de este contenedor y ese contenedor no tiene principio. Ciertamente, esa no es la forma budista de ver las cosas, ni tampoco es la forma científica moderna de verlas. De lo que estamos hablando es de continuidades (continuos mentales, continuos de universos, materia, energía, etc.) y estas continuidades no tienen principio. Una continuidad no puede tener un principio, que una nada comience a convertirse en algo. Ese es el problema con un principio absoluto. Una nada no puede convertirse en algo.
Así que, en cualquier caso, ¿cómo surge la decisión de anhelar alcanzar la iluminación en beneficio de todos los seres si sucede por primera vez? ¿Es una cuestión de libre albedrío, elegimos anhelar la iluminación? ¿Está todo determinado por nuestro karma y sucede de manera mecánica, por lo que no tenemos otra opción, simplemente sucede? ¿O es mucho más complejo que eso? Sin embargo, ni el libre albedrío ni el determinismo explican cómo tomamos decisiones y elecciones. Ambas son posiciones extremas. Para esto, necesitamos aplicar nuestra meditación de la vacuidad.
Vacuidad
Cuando hablamos de vacuidad, nos referimos a una ausencia. Estamos hablando solo de una ausencia. Entonces, ¿una ausencia de qué? Lo que está ausente es que lo que imaginamos, lo que proyectamos, no corresponde a la realidad. Lo que está ausente, entonces, es un referente real que corresponda a lo que imaginamos, no existe tal cosa. Imaginamos cosas que son imposibles, específicamente lo que es imposible y formas específicamente imposibles de existir. Por ejemplo, que las cosas existen por sí mismas, independientemente de cualquier otra cosa, como si estuvieran encapsuladas en plástico y luego simplemente acomodadas allí. Eso no corresponde con la realidad, no existe tal cosa. Entonces, la vacuidad es una ausencia de eso.
No estamos hablando de un vaso que está vacío de agua. Es por eso que la palabra vacío es engañosa, esta palabra en inglés y en español, vaciedad. Verán, en alemán es bastante fácil: solo tienen una palabra. En inglés hay dos palabras, empty y void; que en español se traducen como vacío y vacuidad, respectivamente; ambas son muy diferentes en significado. No estamos hablando de algo que esté vacío de otra cosa. No estamos hablando de nada. Simplemente está ausente. No existe tal cosa. (La palabra shunya en sánscrito es la palabra que se utiliza para cero, nada), pero no significa que no haya nada. Simplemente significa que lo que es imposible no existe.
Libre albedrío
Entonces, cuando hablamos de libre albedrío, ¿qué implica el libre albedrío? Implica un yo verdaderamente existente que puede tomar decisiones de forma independiente, sin verse afectado por causas y condiciones. También implica decisiones que existen de forma independiente por sí mismas, como opciones en un menú, y el yo que existe de forma independiente puede elegir en el menú estas opciones que existen de forma independiente, pero eso es imposible. Si tal yo existiera, estaría como encapsulado en plástico, y estas opciones estarían encapsuladas en plástico, y nunca podrían interactuar. Cualquier cosa que exista de forma independiente significa que no puede hacer nada. No puede verse afectado al decidir hacer algo. No puede verse afectado por haber hecho algo y que luego algo resulte de ello. No puede verse afectado por nada. Entonces, “no existe tal cosa”. La alternativa del libre albedrío es realmente imposible si tomamos el libre albedrío literalmente (que podemos hacer cualquier cosa). Así que digiramos eso por unos minutos.
Daré un ejemplo: no puedes elegir comer a menos que exista alguna condición, como que tienes hambre o hay comida en la mesa y esta es la única oportunidad para comer. No puedes elegir comer a menos que haya comida allí. Cuando analizamos tenemos que pensar en más ejemplos para demostrar el punto, y tratamos de encontrar contraejemplos que refuten la afirmación.
La conclusión, por cierto, de cualquier tipo de análisis como este es centrarse en “no existe tal cosa”. Así es como nos enfocamos en la vacuidad. Por ejemplo, Papá Noel. Mucha gente piensa que Papá Noel existe, existe esa convención. Muy bonito, pero no corresponde a nada real. No hay ningún Papá Noel que viva en el Polo Norte con los renos, si tienen ese mito aquí en Alemania. (Santa Claus vive en el Polo Norte con renos, no sé si Papá Noel también). Así que no existe tal cosa. No corresponde a la realidad. No existe tal cosa. No existe tal cosa como Papá Noel. ¿Cómo nos enfocamos en eso? Quiero decir, no quería que esto fuera una conferencia sobre vacuidad, pero es útil. ¿Pueden ver que no hay ninguna manzana en esta mesa? ¿Qué ven? Nada. No ven nada en la mesa, pero saben a qué se refiere esa nada: significa que no hay manzana, una ausencia de manzana; no significa la ausencia de un elefante. Entonces, lo que aparece es nada, pero lo que entienden es que esto significa que no hay Santa Claus, no hay Papá Noel.
Entonces es lo mismo: no hay libre albedrío, libre albedrío absoluto (que podamos hacer cualquier cosa sin absolutamente ninguna razón detrás). No estamos refutando la toma de decisiones, la toma de decisiones ocurre. Estamos hablando de cómo ocurre la toma de decisiones. Entonces, “no existe tal cosa”. Enfóquense en eso. Básicamente, no prestamos atención a lo que ven nuestros ojos. No nos estamos enfocando en una nada visual. Mental, ¿de acuerdo? Entonces no prestamos atención a lo que estamos viendo. Bien.
Hay muchas razones por las que en el budismo tibetano alentamos a las personas a meditar con los ojos abiertos, no cerrados. Una de ellas es una razón muy Mahayana: si para recordar y tener presencia mental de la vacuidad o la compasión o lo que sea en la vida diaria, tenemos que cerrar los ojos primero, sería imposible aplicar las enseñanzas en la vida cotidiana. Dejen que eso se asiente en ustedes. Si tienen la costumbre de tener que cerrar los ojos para sentir amor y compasión, por favor, la gente no se da cuenta de eso en realidad, adoptan un hábito muy fuerte de cerrar siempre los ojos: “No me molestes. Estoy meditando”, se cierran al mundo. No es muy Mahayana. Creo que es digno de unos momentos de reflexión.
Determinismo
Bien, ahora el otro extremo es el determinismo. Si uno ha estudiado Madyámaka, las enseñanzas sobre la vacuidad, entonces eso nos permite acomodar este concepto de determinismo (que es una frase occidental) en algún tipo de categoría que se adapte a él en el tipo de análisis de la vacuidad Madyámaka. Esto es muy, muy importante. Nuestra forma de pensar occidental que, por supuesto, diferirá de un país a otro, pero si podemos hablar en general, nuestra forma de pensar occidental conceptualiza nuestra experiencia de una manera muy diferente a como lo hace el budismo tradicional. Quiero decir, hay tantas cosas que experimentamos que sería muy, muy difícil decirlas en tibetano, por ejemplo, incluso palabras simples como inseguridad, y mucho menos cosas como “estoy fuera de contacto con mis sentimientos” (que no tiene absolutamente ningún sentido en tibetano).
Por lo tanto, es importante poder adaptar de alguna manera nuestra forma de pensar sobre las cosas al sistema budista para poder usar el sistema budista para ayudarnos, y por supuesto, no habrá una correspondencia exacta. Esa es realmente la clave para poder usar nuestras herramientas budistas de tal forma que nos ayuden en nuestra vida diaria, porque conceptualizamos nuestra experiencia de manera diferente.
Conceptualizar. Permítanme al menos aclarar esa palabra, ya que muchas personas realmente tienen una comprensión muy confusa de eso. Conceptual simplemente significa “pensar con categorías”. Eso es a lo único que se refiere. Pensamos en categorías, como la categoría hombre, mujer, perro, manzana, cualquier cosa. Todas ellas son categorías en las que hay muchos, muchos ejemplos individuales, todos individuales y diferentes y, sin embargo, podemos agruparlos en una categoría: hombre, mujer. Así que clasificamos nuestra experiencia emocional en categorías: inseguridad, nerviosismo, depresión o lo que sea. Y, por supuesto, necesitamos tener estas categorías, porque a eso se asignan las palabras. Asignamos palabras a categorías. No tenemos una palabra diferente para cada manzana del universo; tenemos la palabra manzana que se puede usar para todas ellas.
Entonces categorizamos las cosas de manera diferente. ¿Cómo categorizaríamos el determinismo? El determinismo implica que el resultado realmente existe ya encontrable en la causa, realmente existe allí, sentado allí simplemente esperando aparecer y volverse manifiesto. Ya está determinado qué va a pasar, qué voy a elegir. Así que esa decisión está de alguna manera sentada allí, como fuera del escenario, esperando subir al escenario y suceder para luego salir del escenario.
Entonces si ese fuera el caso… Tenemos la refutación budista de esto, la refutación clásica que se encuentra en todos los textos: si ese fuera el caso, el resultado ya se habría producido, por lo que su surgimiento no podría verse afectado por ninguna condición. Ninguna condición podría causar su surgimiento, porque ya ha surgido. Además, no habría necesidad de que surgiera de nuevo algo que ya ha surgido. ¿Cómo podría suceder una decisión si ya está sentada en tu mente y ha sucedido? Recordemos que verdaderamente existentes significa “como si estuvieran encapsuladas en plástico”, si quieren pensar en términos muy simplistas. (Cuando hago una pausa, eso significa “piensen sobre ello”, obviamente).
Muy bien. Entonces, si todo está determinado, en cierto sentido, todo ha sucedido ya y destruye totalmente cualquier línea del tiempo: nada podría desarrollarse, nada podría crecer, como una flor. No es que la flor exista dentro de la semilla y simplemente presionas un botón y sale. El método budista: usar ejemplos absurdos.
Esta última refutación, la refutación del determinismo, podemos acomodarla en otro formato de análisis de la vacuidad, que es: el resultado no es ni verdaderamente existente ni totalmente inexistente en el momento de la causa. Si verdaderamente existe, si el resultado ya existe, entonces algo ya no puede volver a ser él mismo (ya existe). Estamos hablando en el momento de la causa. Si en el momento de la causa el resultado ya existe, no podría volver a suceder. Por otro lado, si el resultado era totalmente inexistente en el momento de la causa, una nada no puede convertirse en algo. ¿Cómo podría una nada ser afectada para convertirse en algo si fuera totalmente inexistente en el momento de la causa?
Eso, por cierto, lo siento, no puedo resistirme a agregar esto, es algo muy, muy importante de entender si vamos a considerar el caso del aborto. ¿Cuándo comienza la vida? Es una pregunta muy difícil. ¿Es que, durante un cierto período durante el embarazo temprano no es nada, y luego, de repente, se convierte en algo, en un ser humano? ¿Es primero una nada y luego algo? Si es una nada, ¿cómo podría convertirse en algo? Y luego hay muchas, muchas cosas que siguen en el análisis de eso, pero no entraré en ello. Los dejaré pensar al respecto. Un análisis muy, muy interesante e importante de aplicar si van a considerar todo el caso de cuál es la posición budista sobre el aborto.
¿Por qué todos ya han sido nuestras madres, pero no todos han alcanzado la iluminación?
Si no se trata de libre albedrío ni de determinismo al tomar decisiones y elecciones, entonces nuestra discusión realmente se reduce a un análisis de cómo ocurre la toma de decisiones, como las decisiones involucradas en el desarrollo de la bodichita por primera vez (esta es la decisión de aspirar y trabajar hacia la iluminación en beneficio de todos). Me gustaría discutir este tema en términos de una pregunta más amplia, una pregunta muy difícil. Se basa en ciertas suposiciones que tenemos en el budismo. Ahora no estamos cuestionando los axiomas o creencias básicas del budismo. Estamos tomando estos axiomas para unirlos y ver cómo explicamos algo más. En otras palabras, estamos armando algunas piezas del rompecabezas y ahora estamos tratando de averiguar qué implica esto: ¿cómo acomodamos algunas otras piezas aquí?
Si nuestro continuo mental no tiene principio y, en consecuencia, todos han sido nuestra madre en alguna vida anterior, entonces ¿por qué no todos han decidido desarrollar la bodichita y alcanzar la iluminación ya? ¿El tiempo sin principio no fue tiempo suficiente? Esa es la pregunta. Piensen en ello. Esa es realmente una pregunta importante.
Bien, hagamos la pregunta más completa, juntando algunas piezas más. Dado que:
- no hay principio del continuo (así que en nuestro lenguaje ordinario diríamos que el tiempo no tiene principio, aunque el tiempo no es un contenedor),
- el número de seres limitados o seres sintientes es finito,
- todos son iguales,
- siempre ha habido budas, sin principio,
dado todo eso, esas piezas del rompecabezas, entonces la pregunta: ¿Por qué no todos se han iluminado ya? Tiempo sin principio, seres limitados. Así que a medida que cada persona se ilumina, hay menos - hay incontables menos uno, incontables menos dos, etc. Sin principio.
Esta es una situación muy diferente a la otra pregunta: dado que el tiempo no tiene principio, el número de seres limitados es finito, todos son iguales, ¿cómo demostramos que todos han sido mi madre en algún momento? Porque eso es aceptado en el budismo. En el budismo se acepta que todo el mundo ha sido mi madre, y también se afirma que no todo el mundo se ha iluminado ya. ¿Cómo se prueban ambas? Esto es lo que se analiza cuando se hace la meditación analítica. ¿Por qué? Para deshacerse de las dudas. Entonces, ¿cuál es la diferencia?
Por qué todos los seres han sido nuestras madres
En el caso de ser mi madre, si analizamos esta situación, la diferencia es que no existe una fuerza oponente sin principio, mutuamente excluyente, que impida que alguien sea mi madre. Nada sin principio necesita ser superado para convertirse en mi madre. Además, en cada vida que he nacido de un útero o un óvulo, tuve una madre, así que tuve un número infinito de madres. Esa es la diferencia, una de las diferencias.
Para iluminarnos tenemos que superar el no darse cuenta o la ignorancia. Este no darse cuenta impide la iluminación, pero no hay nada que impida que alguien sea mi madre. ¿Qué es lo opuesto (como el darse cuenta del no darse cuenta)? No hay nada opuesto mutuamente excluyente que impida que alguien se convierta en mi madre.
Así que ahora la prueba de que todo el mundo ha sido mi madre. Es un estilo de prueba Prasánguika. A mis alumnos y a mí se nos ocurrió esto, no lo encontrarán en ningún texto, pero he verificado esta prueba con algunos gueshes y están de acuerdo en que es una prueba válida. Aquí está la prueba:
Si un ser ha sido mi madre, entonces todos los seres han sido mi madre, porque todos son iguales y no hay una fuerza oponente sin principio que deba ser superada para convertirse en mi madre, ¿cierto? Para probar algo: aquí está el tema, lo que se quiere probar al respecto y la razón, ¿de acuerdo? Si una persona ha sido mi madre, todos han sido mi madre, porque todos somos iguales, etc. Ahora el método prasanga (entonces presentas lo contrario): si ese no fuera el caso, entonces si un ser no ha sido mi madre, seguiría la conclusión absurda de que nadie ha sido mi madre, incluida mi madre de esta vida, por exactamente la misma razón: porque todos son iguales y ninguna fuerza oponente sin principio tuvo que ser superada para convertirse en mi madre; tienen que pensar en eso. Si alguien ha sido mi madre, entonces todo el mundo ha sido mi madre, porque si una no ha sido mi madre, nadie ha sido mi madre. Ese es un método de prueba prasanga. Piensen en ello.
Está bien. Así que aquí está el punto importante de este argumento. Si alguien ha sido mi madre, todo el mundo ha sido mi madre, porque nada se lo impide y todos somos iguales. Todos somos iguales y nada se lo impide. (Y eso también probaría que, si alguien no ha sido mi madre, nadie ha sido mi madre). Dado todos somos iguales y nada lo impide, entonces, ¿por qué alguien no podría haberse convertido en mi madre? Así que nada hubiera impedido que alguien que no fue mi madre, fuera mi madre. Tienen que entender la forma de pensar prasanga.
Espero que entiendan la idea de que, cuando se estudian los textos de Nagáryuna y demás que tienen todos estos argumentos de tipo prasanga, no son solo algo asentado en un libro de texto, no son un método de análisis y prueba que se limite a lo que se discute en los textos, sino que es una herramienta que podemos usar para analizar y comprender muchas, muchas otras cosas.
Por qué no todo el mundo ha alcanzado la iluminación
Está bien. Ahora, el caso de por qué no todo el mundo se ha liberado e iluminado ya es diferente. ¿Qué es diferente? La diferencia es que aquí hay fuerzas oponentes mutuamente excluyentes, sin principio, que impiden la liberación y la iluminación (los dos obstáculos u oscurecimientos, emocional y cognitivo), esto es, el no darse cuenta o ignorancia, el aferramiento a la existencia verdaderamente establecida, sus tendencias, sus hábitos, etc. Y todos los seres limitados, todos los seres sintientes, son iguales en haber tenido este no darse cuenta y aferramiento como parte de su continuo mental también sin principio. Entonces eso debe tenerse en cuenta en nuestra ecuación.
Así que ahora surge una duda - el clásico estilo indio de comentarios y análisis. Tienen que considerar la duda. Esto es, naturalmente, lo que surgiría en su meditación, en su análisis. Primero lo diré de manera muy simple: Bueno, todo el mundo ha tenido una ignorancia sin principio, pero ¿acaso no ha tenido todo el mundo una naturaleza búdica sin principio? Así que permítanme decirlo de una manera más completa: todos somos iguales en tener, sin principio, como parte de nuestro continuo mental, los factores de la naturaleza búdica que permitirán que este no darse cuenta y aferramiento se detengan para siempre, lo que nos permitirá superar estos oscurecimientos sin principio.
Esto se refiere a lo que yo llamo el entramado de fuerza positiva (bsod-rnams-kyi tshogs) y entramado de darse cuenta profundo (ye-shes-kyi tshogs). Eso generalmente se llama colección de mérito y colección de sabiduría (o entendimiento profundo o como quieran llamarlo). Elegí esos términos muy conscientemente. No estamos hablando de una colección como una colección de sellos en donde, si se obtienen suficientes sellos, entonces se gana un premio o algo así. Y mérito suena como sellos, ¿no? O puntos en un juego, y si obtenemos suficientes puntos, si obtenemos suficiente mérito, ganamos el juego. Ciertamente no es eso. Obtienes el premio, la iluminación, eso es correcto, pero es una fuerza positiva, y toda esa fuerza positiva se conectará y reforzará entre sí.
Y sabiduría o entendimiento profundo son términos completamente inapropiados, porque la lombriz de tierra también tiene esto, por lo que no se puede decir que la lombriz de tierra tenga sabiduría. Solo estamos hablando de las formas en que funciona la mente aquí, ser capaz de recibir información, juntar cosas, saber qué hacer con las cosas, etc. Son muy profundas en el sentido de que es la forma fundamental en que funciona la mente. Y, por supuesto, puede llegar a ser profundo en otro sentido, de profundo (comprensión de la vacuidad).
Así que estos son los factores de la naturaleza búdica. Tenemos estos dos entramados, podemos probar eso. ¿Cómo lo demostramos? No aceptemos simplemente lo que dice el texto, tenemos que demostrarlo. ¿Qué es lo principal que madura de la fuerza positiva? (Las enseñanzas básicas sobre el karma, ahora tienen que recordarlas). Felicidad. Porque todos en algún momento, sin importar lo miserables que seamos, hemos experimentado algunos momentos de felicidad, eso demuestra que tenemos un entramado de fuerza positiva. ¿Cuáles son las leyes del karma? La felicidad es el resultado de la fuerza positiva. La infelicidad, el sufrimiento, es el resultado de la fuerza negativa. Verán, eso se vuelve un poco difícil si pensamos en términos de mérito y pecado; no funciona así. Y todo el mundo tiene un entramado de conciencia profunda, porque podemos recibir información, podemos juntar las cosas. Incluso una lombriz de tierra sabe cuándo algo que ve es comida, no una piedra, y sabe qué hacer con ella. Sabe comerla, ¿cierto? No llamarían a eso sabiduría.
Entonces tenemos estos entramados sin principio y esta vacuidad sin principio, la naturaleza más profunda de la mente. Sin embargo, si tomamos los dos entramados (sin principio), el no darse cuenta sin principio y el aferramiento a una existencia verdaderamente establecida, ¿qué se obtiene? Pongamos los dos juntos, ¿qué se obtiene? Samsara, renacimiento incontrolablemente recurrente y sufrimiento. Esto se debe a que, a menos que vayan acompañados de renuncia o de renuncia y bodichita, los entramados de fuerza positiva y conciencia profunda son entramados de construcción del samsara; eso es un problema, ¿cierto? Sin renuncia o sin renuncia y bodichita, el mecanismo que tenemos allí simplemente perpetuará el samsara. Es muy desagradable, ¿no es cierto?
Ahora tengo que presentar algo antes de la pausa para el té. Según el comentario de Haribhadra sobre el Abhisamayalamkara (Filigrana de realizaciones) de Maitreya… ese es el texto principal, los tibetanos lo estudian durante cinco años en su programa para gueshe. El comentario de Haribhadra es el comentario principal, un comentario indio. Es el texto que habla de los puntos más minuciosos de lo que se desarrolla en estas etapas del camino. En este comentario explica la palabra sánscrita que los tibetanos tradujeron con esta palabra que significa colección o entramado, etc. El hecho de que los tibetanos lo tradujeran de una manera no significa que esa sea realmente la connotación del sánscrito. Solo toman una connotación. Entonces, la forma en que Haribhadra lo explica es que: es la palabra sánscrita sambhara. Sam significa “puro” y bhara es “algo que construye”, por lo que estamos hablando de algo que construye un estado puro. Estos entramados son los que nos permiten construir el estado puro de liberación o iluminación. Entonces, si hablamos de fuerza positiva, por ejemplo, en este contexto no estamos hablando de fuerza kármica positiva. Recuerden, el karma solo va a construir el samsara. La fuerza kármica positiva simplemente nos da bonitos renacimientos, agradables, el mejor tipo de renacimientos. Eso no es lo que queremos. Estamos hablando de un tipo diferente de fuerza positiva que se tiene que acumular durante tres incontables eones para alcanzar la liberación y la iluminación. Esos son los constructores puros, la construcción de la liberación y la construcción de la iluminación.
Es solo de otro texto de Maitreya, Uttaratantra (La continuidad interminable, rGyud bla-ma) (que todo el mundo estudia también, ese es el texto básico sobre la naturaleza búdica) de donde se obtiene la estructura de la base, el camino y el resultado. Así que ahí obtenemos la idea de estos entramados como un nivel básico (lo que produce el samsara), el nivel del camino se refiere a cuando están construyendo la liberación y la iluminación, y el nivel resultante son los dos cuerpos de un buda, el Cuerpo de la Forma Rupakaya y el Dharmakaya (cuerpo de la mente, la mente).
Entonces, para analizar, para tener más herramientas, es muy importante haber estudiado muchos textos diferentes y luego tomar las pequeñas piezas de ellos, las piezas del rompecabezas, y juntarlas. Esa es nuestra responsabilidad, no la responsabilidad del maestro. El maestro puede mostrar algunas formas en las que van juntas, pero depende de nosotros juntar más y más piezas. De esa manera se desarrollan, y es interesante y divertido, y cuanto más lo hacemos más felices somos, porque todo eso tiene la intención de ayudarnos a superar el sufrimiento, todas las enseñanzas sobre la perseverancia gozosa. No es como tener que hacer la tarea de matemáticas por la noche.