El papel de los cinco agregados en las cuatro verdades nobles
Los cinco agregados son un tema muy importante en las enseñanzas del Dharma. Cuando observamos la estructura básica de lo que el Buda enseñó, es decir, las cuatro verdades nobles (o los cuatro hechos de la vida, como a veces me gusta llamarlos), descubrimos que desempeñan allí un papel muy destacado. El primer hecho es el verdadero sufrimiento o los verdaderos problemas. El ejemplo que se da para el verdadero sufrimiento son los cinco agregados: cada uno de nuestros cinco agregados individuales es el verdadero sufrimiento. Las verdaderas causas de ellos son el karma y las emociones perturbadoras y, más profundamente, la ignorancia (es decir, el no darse cuenta y la confusión).
Los agregados generalmente se denominan lo que a veces se traduce como agregados “contaminados”. Esta es una traducción terrible ya que le da una connotación bastante malsana. El término aquí, zag-pa, en realidad connota que los factores agregados son causados por la confusión o el no darse cuenta, y que continúan junto con el no darse cuenta como parte de ellos. Prefiero traducir este término como “manchado”. También se caracterizan por la palabra nyer-len, que traduzco como “obtentor”. Obtienen o provocan más sufrimiento, más agregados, más confusión.
Todos tenemos sufrimientos verdaderos y causas verdaderas, que son los agregados y la confusión que los provoca. Una verdadera detención sería una cesación verdadera de esos agregados y de las causas que los provocan: las dos primeras verdades nobles. Entonces, una verdadera mente que es el camino sería aquella que provocaría esa verdadera cesación y también sería el estado mental resultante una vez que hayamos logrado las detenciones verdaderas.
Factores agregados de nuestra experiencia
Si existe un tema tan central como los cinco agregados en la presentación de las cuatro verdades nobles, necesitamos saber cuáles son esos cinco. ¿A qué se refieren en total? ¿Cómo nos ayuda la comprensión de la vacuidad (el verdadero camino) a detenerlos, a deshacernos de ellos para siempre? Para comprender los agregados, primero que nada, tenemos que traducirlos de una manera más fácil de usar. La palabra "agregados" es un tecnicismo, por lo que no significa mucho para nosotros. Son los factores agregados de nuestra experiencia, si la completamos más. En otras palabras, son los que conforman cada momento de nuestra experiencia. Cada momento de nuestra experiencia se compone de factores agregados, lo que significa factores que están compuestos de muchos elementos diferentes, muchos componentes diferentes. De esto hablan los agregados.
La clasificación budista de las cosas incluye cosas existentes y cosas no existentes. Las cosas existentes son aquellos fenómenos que pueden conocerse válidamente, ya sea mediante cognición desnuda o inferencia. Los fenómenos no existentes son cosas que no pueden conocerse válidamente, aunque sí podemos conocerlos de manera no válida. Como, por ejemplo, la existencia verdadera. La existencia verdadera no existe en absoluto. Pero, a excepción de la cognición no conceptual de la vacuidad, cualquier otra cosa que conozcamos, incluso válidamente, parece existir verdaderamente. Ese aspecto de nuestra cognición que conoce esta falsa apariencia está distorsionado. No es válido. Eso entra en un análisis muy complejo de cómo es que somos capaces de conocer algo que no existe en absoluto, pero ese es otro tema.
Dentro de las cosas que existen, hablamos de lo que se suele llamar fenómenos “permanentes” e “impermanentes”. Estos también son términos engañosos. Una traducción más precisa es fenómenos "estáticos" y "no estáticos". No estamos hablando de la duración de algo, como implicaría “permanente” e “impermanente”, sino de si algo cambia o no durante el período en el que existe. Algo que es estático no cambia, mientras que algo que no es estático sí cambia. Cualquiera de ellos puede durar para siempre o solo por un corto tiempo. En realidad, hay muchas posibilidades: podemos tener ciertas cosas que tienen un principio y no tienen fin, algo que tiene fin y no tiene principio, algo que tiene tanto principio como fin, o algo que no tiene principio ni fin. Aquí los enumeramos con buen estilo analítico budista. De nuevo, este es otro tema para otro momento.
Dentro de estos dos fenómenos, estáticos y no estáticos, cuando hablamos de los factores agregados que componen nuestra experiencia, estamos hablando solo de los fenómenos no estáticos, las cosas que cambian de un momento a otro. Son los que aquí se incluyen en nuestros agregados. Recuerden, estas son partes de la experiencia momento a momento de cada uno de nosotros.
Estos factores agregados pueden estar conectados a un continuo mental o no estar conectados a un continuo mental. Luego, entramos en clasificaciones. Como sabemos, al budismo le encantan las clasificaciones. Los tibetanos realmente se destacaron en completar todas estas cosas. En términos de fenómenos no estáticos que están conectados con un continuo mental, existen aquellos que están conectados con nuestro propio continuo mental y aquellos que están conectados con el continuo mental de otros seres. Por ejemplo, cuando vemos a alguien, los factores que están conectados con el continuo mental de otra persona serían su forma real, la figura y el color de su cuerpo. Esa forma visible no está conectada a nuestro continuo mental, pero es parte de nuestra experiencia porque eso es lo que estamos viendo.
Lo que estaría conectado con nuestro propio continuo mental sería el aspecto cognitivo que surge como una apariencia de la forma de la persona cuando la vemos. Este aspecto cognitivo es una especie de holograma mental que surge, diríamos en Occidente, “en nuestra mente” cuando los fotones de su cuerpo golpean nuestras retinas y desencadenan impulsos neuroeléctricos que viajan a nuestro cerebro cuando los vemos. Ese holograma mental es parte de nuestro propio continuo mental, como también lo son los sensores cognitivos –es decir, las células fotosensibles de los ojos– con los que vimos esa forma y nuestro propio cuerpo. Este tipo de cosas están conectadas a nuestro propio continuo mental. Luego, hay factores agregados que no están conectados a ningún continuo mental. Como, por ejemplo, la forma de la mesa cuando la vemos.
Existen todos estos diferentes tipos de cosas que pueden ser parte de nuestra experiencia momento a momento. El problema con ellos es que nuestra experiencia de estas cosas surge de la confusión sobre cómo existen, contiene confusión y la perpetúa.
Los cinco factores agregados son:
- El agregado de las formas de fenómenos físicos.
- El agregado de las sensaciones de un nivel de felicidad.
- El agregado de la distinción.
- El agregado de otras variables que afectan.
- El agregado de los tipos de conciencia.
El propósito de enseñar los cinco agregados
¿Por qué se enseñan los agregados? Vasubandhu explica en Tesoro de temas de conocimiento (sct. Abhidharmakosha) que se enseñan para aclarar tres desconciertos:
- La confusión de tomar todos los factores mentales como una sola cosa sólida. Para disipar esa confusión, la sensación y la distinción se enumeran como agregados separados de los demás factores mentales, todos los cuales están incluidos en el agregado de otras variables que afectan. No todos los factores mentales se agrupan en un solo agregado.
- La confusión de tomar las formas de fenómenos físicos como una cosa sólida. Para disipar esa confusión, el conjunto de formas se divide en los sensores cognitivos sensoriales, los objetos sensoriales, los grandes elementos y las formas sutiles y no reveladoras de los votos.
- La confusión de tomar la mente, o la actividad mental, como una cosa sólida. Para disipar esa confusión, los tipos de conciencia y los diversos factores mentales se distribuyen en tres agregados separados.
Dividir los agregados de esta manera es para ayudarnos a deconstruir nuestra experiencia, que de eso se trata, ¿no? Queremos deshacernos del apego a que todos ellos constituyan juntos un “yo” sólido, estático y monolítico. Si entendemos que todas las partes en las que se basa el “yo” son múltiples y cambian todo el tiempo, y cambian a diferentes ritmos, eso nos ayuda a disolver nuestra visión de un “yo” sólido basado en ellas.
Según la Antología de temas de conocimiento (sct. Abhidharmasamuccaya) de Asanga, se discuten los cinco agregados porque son la base del malentendido con el que nos aferramos a un “yo” que es conciencia y poseedor de los otros cuatro. Para ayudarnos a superar ese malentendido, existe la discusión de los cinco agregados para deconstruir esa visión errónea que toma una conciencia como “yo” y todo lo demás como posesiones de ese “yo”: mi cuerpo, mis sentimientos, “yo”, el poseedor de estos sentimientos, “yo” que tiene este cuerpo o mente.
Sentir versus distinguir
Entonces, ¿por qué la sensación y la distinción se convierten en agregados separados? Según Vasubandhu, se agrupan en agregados separados porque son la base de la controversia entre los laicos y los ordenados, respectivamente. Las sensaciones de felicidad dirigidas a los objetos de los sentidos inducen el deseo vehemente por ellos. Queremos poseer y no soltar algún objeto sensorial que parezca hacernos felices. Esto hace que los laicos discutan sobre lo que es mío y lo tuyo: mi esposa, mi tierra, mis posesiones, etc. Debido a que la sensación se convierte en la base de tales argumentos entre los laicos, se convierte en un agregado separado.
La distinción se incluye en un agregado separado porque es el tema de argumentación entre las personas ordenadas que debaten sobre puntos de vista filosóficos. Tales argumentos se basan en una distinción correcta e incorrecta de cuál es la visión más profunda, y eso puede llevar a mantener una visión distorsionada. Debido a que la distinción causa discusiones entre las personas ordenadas, es por eso que se la señala como un agregado separado.
Una segunda razón que da Vasubandhu de por qué las sensaciones y las distinciones se convierten en sus propios agregados separados es porque son las raíces del samsara. Hay muchas raíces diferentes del samsara en diferentes contextos, pero aquí Vasubandhu especifica que las sensaciones de felicidad física y mental, sufrimiento y ecuanimidad conducen al deseo vehemente, y el deseo vehemente activa los potenciales kármicos de modo que los impulsos kármicos que arrojan producen un renacimiento incontrolablemente recurrente, el samsara. Por eso la sensación se especifica como su propio agregado. La distinción distorsionada conduce a visiones distorsionadas, y estas también son una raíz del samsara. Esta es la razón por la que las sensaciones y las distinciones se convierten en agregados separados.
El orden de los cinco agregados
El orden habitual de los cinco agregados es: el agregado de las formas de fenómenos físicos, las sensaciones, la distinción, las otras variables que afectan y los tipos de conciencia. Ese orden es muy importante en términos del proceso de disolución en la actividad mental de luz clara más sutil en el momento de la muerte. Esa secuencia se explica en el tantra anutarayoga y va desde el agregado más burdo al más sutil.
Primero se disuelve el agregado de la forma, luego las sensaciones, luego la distinción, luego las otras variables que afectan (sobre todo los impulsos kármicos) y luego la conciencia misma. Esto lo encontramos en la clase superior de tantra. Asanga presenta algo similar en cuanto a la secuencia de disolución de los elementos en asociación con la secuencia de disolución de los agregados.
Según Vasubandhu, el orden va de lo más burdo a lo más sutil en términos de lo que es más fácil de entender. El agregado de la forma es la más fácil de entender porque eso es lo que vemos y lo que oímos. Entonces, la sensación es más fácil de entender entre los factores mentales porque todos experimentamos felicidad o infelicidad por lo que tocamos, por lo que vemos, por lo que comemos. Después, lo más sutil es la distinción. Para poder sentir algún nivel de felicidad o infelicidad, necesitamos distinguir la visión del rostro de esta persona de aquella, la sensación física de lo duro de lo suave, el sonido de esta palabra de aquella, y así sucesivamente. Más sutiles que eso son las otras variables que afectan. La más importante de ellas es la intención: la intención de experimentar algo, de tocar algo, de comer algo. Luego, más sutil que eso sería la conciencia.
Vasubandhu también explica que el orden de los agregados se realiza de acuerdo con la generación de emociones perturbadoras. La mayoría de las personas somos muy físicas, por eso explica que primero vemos cosas, por ejemplo, y luego surgen sensaciones al ver algo, y eso induce deseo y atracción. El deseo y la atracción conducen a una distinción inversa: distinguimos lo sucio como limpio, el sufrimiento como felicidad, lo no estático como estático y el yo no sólido como un yo sólido. Entonces, tenemos una visión distorsionada de nosotros mismos, y eso conduce a otras emociones y actitudes perturbadoras, y esas son las variables que afectan. Cuando tenemos todas estas emociones y actitudes perturbadoras, entonces la conciencia se ve infectada por ellas y su forma de conocer se distorsiona. De esta forma, el orden deriva de cómo se generan las emociones perturbadoras.
Eso es un poco de lo que encontramos en los dos abidharmas mayores, los de Vasubandhu y los de Asanga.